viernes, 22 de mayo de 2015

Al proponer instalar elementos del Escudo Antimisiles norteamericano en Ucrania, Turchinov provocaría una nueva crisis del Сaribe

Difícilmente Washington aprovechará la oferta del secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, Alexánder Turchinov y no desplegará en territorio ucraniano elementos del sistema de defensa antimisiles, ya que ello podría desembocar en una segunda crisis del Caribe, considera Korótchenko.
Turchinov declaró el miércoles que Kiev puede estudiar la posibilidad de mantener consultas sobre el despliegue de componentes del Escudo Antimisiles en su territorio. Como motivo para una medida así mencionó la “defensa frente a la amenaza nuclear”. “Las declaraciones de Turchinov tienen un carácter claramente provocador. En este caso Kiev desea formar parte de la coreografía de los planes antimisiles norteamericanos en Europa, aunque considero que los EEUU sopesando la situación actual difícilmente se decidirán a instalar elementos del Escudo Antimisiles en ese país”, manifestó Korótchenko.
En opinión del experto, la administración del presidente de los EEUU se hace cargo de que el despliegue de componentes del sistema DAM puede provocar una dura respuesta simétrica por parte de Rusia. Además dada la actual situación de inestabilidad que vive Ucrania Kiev sería incapaz de garantizar la seguridad de las instalaciones de los sistemas norteamericanos en el territorio del país.
Segunda crisis del Caribe
En palabras de Korótchenko, Washington debe entender claramente, que la instalación de componentes del sistema DAM en Ucrania implica la destrucción del actual equilibrio político-militar que se ha conformado en el mundo y lo abocaría completamente a un posible conflicto nuclear.
“En teoría los EEUU podrían desplegar en territorio ucraniano la variante terrestre del sistema Aegis, es decir las lanzaderas de los sistemas antimisiles y el radar de fijación de objetivos. Pero ello significaría atravesar la “línea roja”, con todas las consecuencias que eso implicaría. Desde el punto de vista político-militar es una absoluta locura y en la práctica conduciría a una segunda crisis del Caribe ya que la respuesta rusa sería especialmente dura.
Si Washington quiere confrontación la va a tener. Pero yo no creo que los EEUU quieran poner en riesgo su seguridad nacional”, señaló el experto.
Traducción de Íñigo Aguirre
Tomado: tercerainformacion