jueves, 2 de junio de 2016

Campesinos colombianos mantienen huelga y movilizaciones

Con bloqueos de vías y temor por enfrentamientos entre manifestantes y el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), prosigue el paro agrario en Colombia, en el que participan miembros de agrupaciones campesinas, nativas y afrodescendientes.
Dirigentes de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) confirmaron a Prensa Latina que las movilizaciones iniciadas el lunes proseguirán hasta tanto los demandantes obtengan respuestas a sus exigencias mediante el diálogo con el Gobierno.
La víspera esa alianza denunció hostigamientos y presiones del Ejército contra los reclamantes, además del uso excesivo de la fuerza en algunos puntos como la localidad La Delfina, Valle del Cauca, donde murió uno de los asistentes a la protesta debido a altercados con el Esmad, afirman líderes aborígenes y la plataforma Congreso de los Pueblos.
Según RCN La Radio hubo choques también en el municipio de Hobo, perteneciente a Huila, como resultado de los cuales cinco personas sufrieron heridas.
Este miércoles la situación se torna compleja en el departamento de Cauca, en el cual los reclamantes, que superan la cifra de 12 mil, obstruyen carreteras como la Panamericana, importante arteria de esa región, con costas en el océano Pacífico.
A pesar de la presencia paramilitar y de las amenazas que hemos recibido varios líderes, nosotros saldremos a manifestarnos y a presionar hasta que el Ejecutivo se reúna con las comunidades, afirmó Luceida Juricué, consejera de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca, citada por el diario local El País.
Los demandantes aseguran que el Ejecutivo incumplió compromisos pactados previamente tras varias huelgas del campesinado y mingas (movilizaciones) de pueblos originarios.
Además piden una revisión de los tratados de Libre Comercio, firmados con varias naciones, a los que responsabilizan con la quiebra de pequeños productores.
Igualmente rechazan la ley Zidres por considerar que persigue despojar a cultivadores de sus terrenos para otorgárselos a empresarios y multinacionales.
El desarrollo de proyectos mineros en espacios naturales de prominencia es otro de los motivos del paro.
Además los labriegos abogan por una reforma rural que reconozca los tradicionales espacios agroalimentarios campesinos y la identidad de las poblaciones asentadas en el campo colombiano, asimismo exigen respuesta a un pliego de solicitudes presentado en marzo.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, anunció que representantes gubernamentales viajarían a las regiones para verificar el cumplimiento de los pactos, mirar en qué se avanzó y acelerar la solución a temas pendientes.
Tomado: Prensa Latina