Colombia comparte con Venezuela una de sus fronteras,
considerada por los investigadores como una de las fronteras calientes, esto
debido a las múltiples problemáticas sociales que se han sucedido en el Estado
colombiano y se trasladan a las fronteras. Convirtiendo estas zonas en
escenarios de conflictos, no solo armados, sino sitios de refugio de los que
huyen en busca de protección; víctimas de la violencia, de la pobreza o los que
buscan mejores condiciones de vida, las que en su país no encontraron.
Se puede decir, que las fronteras se convierten en una
extensión de las crisis sociales que mantiene Colombia, que los gobiernos
centrales no han logrado resolver, menos los gobiernos locales, quienes prefieren
el éxodo masivo de nacionales a procurarles mejores condiciones de vida digna,
sin violencia y sin carencias de políticas sociales.
Esta situación ha llevado a un gran número de colombianos a
pasar la frontera e instalarse de forma irregular en Venezuela, sin que ello
sea impedimento para que las problemáticas sociales se trasladen, lo que viene
generando una crisis social, según lo ha planteado el gobierno venezolano,
donde se han presentado fenómenos como el contrabando, delincuencia organizada
y la existencia de grupos armados.
Elementos a los que el gobierno nacional no les ha dado mayor
importancia, pues Colombia no ha sido capaz de resolver su conflicto interno,
menos aún las problemáticas derivadas de este, de ahí que le resulte más cómodo
que los nacionales pasen la frontera. A asumir con responsabilidad la situación
interna.
Esta situación queda en evidencia luego de que el gobierno
venezolano tomara la decisión de expulsar a todos los colombianos que se
encontraban se forma irregular en la zona fronteriza, las razones pueden ser
reales o infundadas, sobre la presencia de grupo de paramilitares sobre este
territorio, con el ánimo de desestabilizar al gobierno.
Esta decisión origino la expulsión y el éxodo masivo de un
gran número de colombianos quienes tuvieron que abandonar el territorio
venezolano en un corto periodo y hacer regreso a su país, el que un día los
obligó a partir.
Luego de esta decisión y como era de esperarse los medios de
desinformación colombianos le han dado un amplio cubrimiento a la forma tan
cruel e inhumana como han sido tratado sus compatriotas, los que la otra parte
de Colombia no sabía que existían, los que son útiles en periodos electorales
para pasar la frontera y votar. Eso explica la presencia del nefasto Uribe Vélez
o las declaraciones de los otros expresidentes quienes pretender culpar a
Maduro de los problemas nacionales.
Resulta que los periodistas nacionales no les han preguntado
a los colombianos cuales fueron sus motivos para dejar su país, no han contado cuántos
de estos tuvieron que huir de la violencia que ha dejado la llamada política de
seguridad democrática, cuántos de ellos se fueron del país en busca de mejores
oportunidades debido a la aplicación de modelo neoliberal impuesto por Gaviria,
Samper, Pastrana, que los dejó en la miseria. Estos mismos son los que ahora le
reclaman a la Comunidad Internacional que tome medidas y obligue a Venezuela a
cumplir con lo que el Estado nacional no ha sido competente. Eso puede explicar
la decisión que se tomó en la OEA.
Lo que resulta macondiano es el oportunismo de personajes
como Uribe Vélez y del mismo Santos, quienes han visitado la zona con el fin de
recibir réditos políticos, acaso no son estos los que han originado el
desplazamiento de los colombianos. Pero como la frontera es más visible para
hacer politiquería y tiene mayor importancia a nivel internacional.
Esta situación no es diferente a la de otras zonas, donde los
campesinos huyen por la violencia, los enfrentamientos armados y la pobreza;
estos escenarios los medios no le dedican gran cubrimiento ni visitan las
zonas, son los colombianos invisibles para el sistema. Por ello, deambulan por
las grandes ciudades sin recibir siquiera el reconocimiento oficial.
Por ello, le resulta más fácil a Colombia culpar a Maduro que
asumir su responsabilidad en el desplazamiento que durante décadas se viene
dando en el país, por ello invoca a la Comunidad internacional para que le
resuelva sus problemáticas internas.
Finalmente se puede decir, que si la culpa es de Maduro por
no asumir como propios los problemas colombianos.
