Estados Unidos permanecerá en Afganistán por décadas, según reveló un alto funcionario militar citado este miércoles por el diario The Washington Post.
El alto funcionario, que guardó el anonimato, indicó que miles de soldados permanecerán en la nación centroasiática pese a que se suponen que los estadounidenses deben abandonar ese país en 2017, según la estrategia aprobada por el presidente Barack Obama y el Pentágono.
La decisión puede estar impulsada por la inestabilidad del gobierno respaldado por Washington en Kabul, cuyo control de la capital es pobre y se ve amenazado por fuerzas rivales incluidos los talibanes, Al Qaeda y el Estado Islámico (EI), dijeron los funcionarios citados por el rotativo.
Plantea el Post que el presidente afgano, Ashraf Ghani, es descrito por los estadounidenses como un “socio dispuesto y confiable” que puede proporcionar bases para atacar a los grupos terroristas no sólo en Afganistán, sino también en todo el sur de Asia durante el tiempo que persista la amenaza terrorista.
Según las fuentes el Pentágono reconoce que la creación de una fuerza de policía y del Ejército afgano eficaz demorará tiempo y la inversión de miles de millones de dólares al año en financiamiento externo, una probable justificación para dilatar la anunciada retirada en 2017.
Hemos aprendido que realmente no se puede dejar ese país, señaló un funcionario no identificado del Pentágono, quien aseguró que van a permanecer allí “un tiempo muy largo”.
Funcionarios no identificados del gobierno de Obama confirmaron los informes y aseguraron que esa presencia es parecida a la intervención en Corea del Sur, donde Washington desplegó decenas de miles de soldados desde el fin de la Segunda Guerra Mundial para cimentar su dominación sobre la Cuenca del Pacífico.
Según el Post, el anuncio coincide con una escalada de la presencia militar estadounidense en Asia Central, Oriente Medio y África del Norte.
En ese sentido recordó que la semana pasada el gobierno de Obama firmó las órdenes que autorizan a los militares expandir sus operaciones en el noreste de Afganistán contra EI, mientras el secretario de Defensa Ashton Carter anunció nuevos despliegues de fuerzas terrestres en Iraq y el vicepresidente estadounidense, Joseph Biden, declaró que Washington está dispuesto a buscar un solución militar en Siria.
A esto se agrega que el viernes último el general estadounidense Joseph F. Dunford dijo que su país se apresta a lanzar una “acción militar decisiva” en Libia, lo que según el diario The New York Times puede ser el preludio de una extensión de la presencia militar de Washington en otras naciones del continente africano.
El articulo del Post asegura que la clase dominante de Estados Unidos y el complejo militar tratan de utilizar Afganistán como un puesto militar permanente para operaciones en todo Asia Meridional y Central, lo que señala, forma parte de su campaña para desestabilizar a Rusia y China.
Tomado: Prensa Latina/ LibreRed.net
