lunes, 22 de abril de 2013

Carabineros con balines de pintura


En la última marcha de estudiantes chilenos, carabineros estrenó una nueva arma represora: balines de goma con pintura estilo paintball supuestamente para marcar a los encapuchados. La polémica creció cuando más de una decena de manifestantes que lo hacían a cara descubierta recibió sendos impactos en sus rostros, incluso algunos de ellos pueden perder la vista o uno de sus ojos.
El pasado 11 de abril, las organizaciones estudiantiles que luchan por conseguir en Chile una educación gratuita, laica y de calidad convocaron a una marcha –la primera del año– para demostrar el descontento por el poco avance en esta materia. A la cita llegaron unas 150 mil personas sólo en Santiago, constituyéndose en una de las manifestaciones más masivas desde que comenzó a profundizarse la crisis en colegios y universidades, a mitad del 2011.
Mientras la marea humana caminaba en medio de batucadas, tambores, bailes y disfraces, comenzaron las típicas escaramuzas entre jóvenes más radicales con rostro cubierto –conocidos en Chile como encapuchados– y la policía. Estos enfrentamientos siempre han incluido pedradas, barricadas con neumáticos, escombros, palos y hasta bombas molotov por parte de los primeros. Desde el otro lado, carros hidrantes, balines de goma y muchos gases son utilizados por los oficiales para calmar los ánimos. Ahora los carabineros le agregaron los balines con pintura.
Los primeros en reaccionar ante este método de disuasión policíaca fueron los propios estudiantes. El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Diego Vela, llamó enérgicamente a las fuerzas policiales a terminar con el uso de balines en las manifestaciones y recordó que “carabineros se comprometió a no usarlas hace tres años”.
Otros dirigentes denunciaron un amedrentamiento por parte de los oficiales para evitar que la ciudadanía participara en nuevas convocatorias.
Desde el Instituto Nacional de Derechos Humanos se mostraron muy preocupados por la situación. “La herramienta se ideó para que Carabineros pudiera marcar e identificar a los que cometen delitos en manifestaciones, pero vimos que ninguna de las personas detenidas tenía rastros de pintura, por lo cual no se está cumpliendo ese objetivo. Acá no se ha cumplido la distancia mínima y dónde se apunta”, dijo la directora del INDH, Lorena Fries. “Un caso puede ser una individualidad, pero cuando llegan cinco personas con esta misma situación... hay un tema de fondo en materia de orden público y garantía de los derechos humanos”, declaró.
La última convocatoria estudiantil también se trasladó a la ciudad puerto de Valparaíso. En ese lugar, efectivos de carabineros actuaron con excesiva violencia en contra de algunos manifestantes, razón por la cual fueron dados de baja. No obstante, Fries dijo esperar “un poco más” que esas sanciones para terminar con los abusos policíacos.
Días después, los afectados junto a otras personas marcharon cerca de la unidad central de Carabineros en protesta por el uso de balines de pintura. “Estamos hablando de descriterio de carabineros cuando hay seis u ocho francotiradores disparando a la vez al lado de un mayor, esto no es azar”, sostuvo Germán Grunet, quien recibió un balín en un ojo.
El Colegio Médico respaldó estas denuncias y pidió el retiro de los balines. “Nuestra profesión como oftalmólogos es salvar los ojos, por eso estamos muy preocupados. Creemos que si se sigue aplicando podríamos tener muchos más lesionados y ciegos”, dijo Felipe Vega, médico oftalmólogo de la Unidad de Trauma Ocular (UTO) del Hospital del Salvador.
“Nuestra recomendación a las autoridades de gobierno debiera ser la supresión de esta arma disuasiva, que puede provocar casos realmente gravísimos y con resultado de muerte”, agregó el presidente del Departamento de Derechos Humanos del Colegio Médico, Alvaro Reyes.
Otro de los lesionados es el arquitecto Enrique Eichin, de 58 años, quien está a punto de perder el ojo debido al impacto de uno de estos proyectiles. “El objetivo que cumplirían esos rifles de identificar a las personas que están causando daños es un absurdo, una excusa, porque no disparan de manera dirigida, son ráfagas que tiran al voleo. Ese tipo de armamento, que aparece como inofensivo, debe salir de las Fuerzas Especiales. Si no, va a seguir habiendo ciegos en este país”, dijo.
A su vez, Natalia Kamisato, otra de las estudiantes afectadas, acusó a carabineros de terrorismo. “Esto es un terrorismo que se está generando para desarticular todo el movimiento estudiantil y social. Nosotros estamos por que este tipo de elementos sea retirado definitivamente de carabineros”, afirmó.
Ante la polémica, el general director de carabineros, Gustavo González, anunció escuetamente que se reevaluará el uso de balines de pintura en la realización de convocatorias masivas.
La próxima manifestación nacional convocada por la Confederación de Estudiantes de Chile será el miércoles 8 de mayo. Habrá que ver si efectivamente se acabarán los balines de goma o si el paintball con los estudiantes continúa.
@chripalma
Tomado: Pagina/12