Los ataques siguieron a diparos de artillería la tarde de este miércoles después que un portavoz de la resistencia palestina reivindicó haber lanzado 130 cohetes contra territorio israelí tras la muerte de tres de sus miembros en la ciudad de Khan Younis.
Una informante militar en Tel Aviv admitió 50 impactos, ninguno de los cuales causó víctimas.
El primer ataque de la aviación israelí fue contra la ciudad de Rafah, cerca de la frontera con Egipto, seguido de otro, con cohetes aire-tierra, contra el vecindario de Al Nasser, en el sur de Gaza.
Las fuentes palestinas dijeron que ninguno de los ataques causó víctimas.
Los medios israelíes citaron a fuentes militares anónimas según las cuales la aviación también atacó los distritos de Qara, Beit Lahia y Areen, en el oeste de Rafah, en los cuales afirman hay bases de las brigadas Al Quds (nombre árabe de Jerusalén) y Mártires de Al Aqsa.
Un portavoz de Hamas, la agrupación que gobierna en la franja, responsabilizó a Israel por las consecuencias del incremento de los ataques y reiteró el derecho a defenderse de las persistentes agresiones de la artillería y los soldados israelíes a través de la cerca de delimitación.
La franja Gaza, uno de los territorios más pobres y superpoblados del mundo, está sometida por Israel hace siete años a un feroz bloqueo por aire, mar y tierra que causa enormes sufrimientos a más de un millón de palestinos que en ella residen.
Desde comienzos de semana la tensión tanto en la franja, como en la Cisjordania, se disparó el martes después que soldados israelíes mataran a tres civiles, uno de ellos un adolescente de 18 años y otro un juez de doble nacionalidad palestina y jordana.
La muerte de los tres miembros de la resistencia palestina este miércoles complicó aún más la situación, agravada por la casi certeza de que las conversaciones entre los gobiernos palestino e israelí se encaminan al fracaso definitivo.
Para la semana próxima está programada una visita a Washington del presidente palestino, Mahmud Abbas, quien la semana pasada obtuvo al apoyo de la Liga Árabe a su negativa de reconocer a Israel como Estado judío.
Tomado: Prensa Latina