Las delegaciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y del gobierno del presidente Juan Manuel Santos recesarán por hoy los diálogos que sostienen aquí destinados a buscar el fin del conflicto.
En el contexto de las conversaciones de paz que ambas partes desarrollan desde 2012 y que retomarán mañana, la mayor guerrilla colombiana llamó la víspera a respetar el Acuerdo General de La Habana, y desestimó las fórmulas lejanas al diálogo para poner fin a la confrontación armada en la nación suramericana.
No deja de sorprendernos la manera como se insiste en imponernos fórmulas de terminación del conflicto absolutamente ajenas a los diálogos de paz desconociendo el Acuerdo General de La Habana, expresó en ese sentido el jefe de la delegación de paz insurgente, Iván Márquez.
Al respecto, el líder guerrillero manifestó que la agenda contenida en dicho acuerdo no puede ser variada caprichosamente, y mucho menos mediante instrumentos normativos inadecuados para satisfacer las exigencias de lo pactado.
Ese es el caso del proyecto de Ley Estatutaria 94 de 2015 "por medio de la cual se regula el plebiscito por la paz", una iniciativa extraña y exótica para los efectos buscados, nunca considerada por quienes tenemos la responsabilidad de establecer los mecanismos de refrendación de lo que finalmente llegará a acordarse, señaló.
Según Márquez, esa iniciativa "la rechazamos no sólo por tratarse de una fórmula inconsulta, sino porque constituye la más inocua y menos propicia de todas las iniciativas que a propósito de la paz cursan en el Congreso de la República", enfatizó.
¿Qué objeto tiene gastarle tiempo a un proyecto de plebiscito que, por una parte, no fue consensuado en la mesa de La Habana, y que por otra, se sabe anticipadamente que la limitación de su alcance jurídico le impide aprobar disposiciones y temas necesarios, para la implementación de un Acuerdo Final?, cuestionó la guerrilla.
En su alocución, Márquez calificó tal proyecto de seudo-referendo disfrazado de plebiscito e instó a la materialización de mecanismos de refrendación serios, sólidos, de alcance permanente, que permitan poner en marcha los acuerdos surgidos de la mesa de paz de La Habana.
Tomado: Prensa Latina
