Políticos colombianos y defensores de derechos humanos convocan hoy a una movilización internacional para el venidero 20 de julio con el propósito de exigir la instauración del cese el fuego por todas las partes involucradas en el conflicto.
A través de Twitter el senador Iván Cepeda y varios activistas piden a los ciudadanos del mundo sumarse a la iniciativa en cualquier rincón o país para demandar una tregua bilateral y el fin del período bélico.
Víctimas de la confrontación, líderes de organizaciones sociales, campesinos, parlamentarios, abogan por el silenciamiento de todos los fusiles para minimizar la victimización de la población civil y generar confianza en torno a los diálogos pacificadores entre el Gobierno y las insurgentes FARC-EP.
Tal medida ha sido descartada por el Ejecutivo, que opta por conversar con la insurgencia en medio de la conflagración, postura incomprendida por una parte de la sociedad colombiana.
El conflicto aumentó su intensidad desde mediados de mayo tras la reanudación de los bombardeos castrenses contra los campamentos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), y la suspensión de la pausa combativa decretada con anterioridad por ese movimiento guerrillero.
Mientras las dos delegaciones intentan hallar una salida concertada a la contienda durante las pláticas en la capital cubana, a lo interno del país andino crecen la violencia y el fenómeno del desplazamiento humano.
Paralelamente a las exhortaciones por las redes sociales, en Bogotá organizan un foro por la paz, plantones y marchas a partir del 19 de julio, con la finalidad de respaldar los ciclos de encuentros entre las partes beligerantes y clamar por un cese el fuego total.
El conflicto ha ocasionado la muerte a unas 230 mil personas en el transcurso de más de medio siglo.
Establecer una mesa de concertación con el Ejército de Liberación Nacional, otro de los grupos guerrilleros activos en la nación, es uno de los pasos pendientes a favor de la distensión.
Tomado: Prensa Latina
