Según lo previsto, España recibirá cuatro navíos de guerra, capaces de destruir aviones, misiles, submarinos y embarcaciones. Después del destructor USS Donald Cook, arribará el próximo junio el “Ross” y los otros dos, el “Porter” y el “Carney”, llegarán en 2015.
Estos cuatro destructores realizarán operaciones en el Mediterráneo y el Norte de África; no obstante, la cercanía de la base naval de Rota a países como Irak y Afganistán, donde el país norteamericano ha mantenido una larga intervención, ha provocado una gran polémica.
La presencia de esos cuatro destructores añadirá 1 200 marinos y 1 500 familiares suyos a la comunidad estadounidense en Rota, que sumará las 6 mil personas; cifra que convierte a esta base en el lugar con más soldados norteamericanos desplegados en un centro de este tipo en el continente europeo.
Según alegatos de la máxima autoridad estadounidense en este enclave, el capitán de navío Greg Pekari, el envío de ese dispositivo muestra la “dedicación” de Estados Unidos a sus aliados europeos, y “sólo va a potenciar la seguridad de la región”.
Mientras el Gobierno español ha puesto en marcha el programa Welcome to Rota, para recibir a esas embarcaciones, tanto los partidos opositores como el pueblo español están en contra de este despliegue pues lo consideran una seria amenaza.
La masiva presencia de efectivos y armamento en las bases andaluzas, argumentan los opositores, convierten la zona en un blanco militar internacional, además, los pobladores de zonas colindantes a estas instalaciones se ven sometidas a todo tipo de riesgos.
Tomado: Hispan TV
