miércoles, 27 de agosto de 2014

Cinco países lanzan amplios ejercicios antiterroristas en China

 Ejercicios antiterroristas que involucran más de 7 000 efectivos de cinco países miembros de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) han arrancado en China, siendo este el simulacro más amplio jamás realizado bajo la égida de este organismo de se­guridad.
Las maniobras Misión de Paz 2014 que se llevan a cabo en un polígono en el norte de China, cuentan con la participación de Rusia, Kazajstán, Kirguistán y Tayikistán.
Según Russia Today, una parte de los ejercicios incluye bloquear los emplazamientos del enemigo y cuenta con amplios despliegues de aviación, artillería y vehículos acorazados. En esta operación, en la que también se practicará defensa antiaérea y combate radioelectrónico, se utilizará munición de guerra.
Otra etapa supone una operación antiterrorista en condiciones urbanas, para la cual ha sido construida una ciudad en este polígono, ubicado en la región autónoma de Mongolia Interior.
El objetivo de las maniobras, que continuarán hasta el 29 de agos­to, es ahondar la colaboración en­tre los miembros de la organización, extender su influencia en el mundo, profundizar la cooperación en el ámbito de la Defensa, especialmente en la lucha contra el terrorismo y las amenazas regionales.
Bajo el precepto de la no alineación, la OCS fue fundada el 15 de junio del 2001 por los líderes de Chi­na, Rusia, Kazajstán, Kir­guis­tán, Tayikistán y Uzbekistán, con el objetivo de compartir responsabilidades de seguridad en la región de Asia Central. Mongolia, India, Irán, Pakistán y Afganistán intervienen en calidad de observadores, mientras que Bielorrusia, Sri Lanka y Turquía tienen el estatuto de “socios de diálogo”.
En virtud del llamado “Espíritu de Shanghai”, que pone como condición para el éxito la confianza, la igualdad, el respeto de la diversidad cultural y la búsqueda del desarrollo común entre los socios de una empresa, la OCS se ha de­sem­peñado como un modelo de asociación.
A juicio de analistas, en los últimos años la OCS se ha convertido en una plataforma de integración de avanzada, como respuesta geopolítica a la ofensiva de Estados Unidos y sus aliados en el subcontinente asiático.
Tomado: Granma