Desde el año 2004 hasta julio de 2014 los aviones teledirigidos estadounidenses mataron entre 2.340 y 3.790 personas en Pakistán, según señaló un estudio de la Oficina de Periodismo de Investigación del Reino Unido.
A partir de fuentes abiertas, la institución calculó que más de la tercera parte de las víctimas mortales eran civiles y alrededor de 200, niños, mientras más de un millón de ciudadanos recibieron heridas de diversa gravedad.
De los 389 ataques aéreos ejecutados en ese lapso, 338 se llevaron a cabo bajo la administración de Barack Obama.
El reporte destacó que los de julio pasado fueron los bombardeos más letales en los últimos 24 meses, pues con solo ser tres -todos en la noroccidental provincia de Waziristán del Norte- causaron 32 muertes, el promedio más alto desde abril de 2011, cuando 24 personas murieron en dos ataques.
En junio, tras una pausa de más de cinco meses y medio, los aviones no tripulados estadounidenses volvieron a la carga sobre la nación surasiática.
Según expertos militares, la reanudación de los ataques de los drones se produjo en apoyo a la ofensiva que desde mediados de junio libra el ejército pakistaní en aquel territorio limítrofe con Afganistán para liquidar a la militancia antes de la retirada de las tropas estadounidenses del vecino país.
Sin embargo, después de cada ataque el Gobierno pakistaní ha asegurado que, por contrarias a la soberanía y la integridad territorial del país, siempre ha condenado y condenará esas incursiones aéreas.
Tomado: PL