La Guardia Nacional del estado norteamericano de Missouri refuerza hoy sus posiciones en Ferguson, con el fin de neutralizar las protestas por el asesinato del joven negro Michael Brown a manos de un policía blanco el 9 de agosto pasado.
Según el diario Saint Louis Post-Dispatch, desde la tarde del lunes las autoridades se preparaban para enfrentar nuevos incidentes, y el jefe de la Patrulla de Carreteras, capitán Ronald Johnson, presentó al brigadier general Gregory Mason como jefe de las unidades armadas recién desplegadas en dicha localidad.
La presencia de estas tropas se debe a una decisión anunciada ayer por el gobernador del estado de Missouri, Jay Nixon, quien después de ordenar su despliegue en el terreno levantó el toque de queda instaurado desde el sábado por la noche.
Nixon argumentó que estas agrupaciones militares junto a la policía local resultan suficientes para garantizar el cese de las manifestaciones que comenzaron hace una semana por la muerte de Brown, de 18 años, contra quien el oficial de policía Darren Wilson disparó seis veceses pese a que estaba desarmado.
En torno al uso de armas y equipos del Pentágono en las acciones represivas, la senadora demócrata por Missouri, Claire McCaskill, quien viajó a Ferguson la semana pasada, señaló que "necesitamos desmilitarizar este litigio, este tipo de respuesta se ha convertido en un problema en lugar de ser la solución".
La legisladora añadió que la situación allí es totalmente inaceptable y exigió a las autoridades locales respetar el derecho del público a protestar de forma pacífica.
El presidente estadounidense, Barack Obama, calificó la víspera de innecesario el uso excesivo de la fuerza contra dichas manifestaciones en Ferguson y expresó su esperanza en que la presencia de la Guardia Nacional se utilice allí de forma limitada y apropiada.
Las declaraciones del mandatario tuvieron lugar ayer lunes poco después de recibir una explicación de parte del Fiscal General Eric Holder, quien viajará mañana a Ferguson para evaluar en el terreno la situación, que se ha convertido en un escándalo nacional tras las denuncias de los abusos de la policía local.