“La limpieza, que incluye el desmantelamiento de bombas y municiones químicas, se iniciará antes de finalizar el año, dando así por terminado un diferendo que surgió al finalizar la Segunda Guerra Mundial”, dijo Núñez Fabrega en una declaración enviada a Efe.
La operación “correrá por cuenta de expertos del Pentágono, quienes estarán viajando a Panamá en fecha próxima para efectuar el primer reconocimiento del trabajo a realizarse”, agregó el ministro panameño de Exteriores.
Las “bombas y municiones” químicas se encuentran en la isla San José, en el Pacífico panameño, y según datos publicados por la prensa local fueron dejadas allí en las décadas de 1930 y 1970 por el Ejército de los Estados Unidos.
Oficialmente no se ha precisado qué tipo de armas químicas se encuentran en la isla, pero según diversas fuentes periodísticas, se trata de bombas de gas mostaza y fosgeno que formaron parte de un programa de protección del Canal de Panamá y de unos experimentos para ver el comportamiento de esos agentes en el trópico.
“Los ejércitos de los Estados Unidos, Gran Bretaña y Canadá dejaron caer toneladas de armas químicas en la isla de San José anticipando su uso en la invasión a Japón”, afirmó este viernes el canciller Núñez Fábrega.
El retiro de las armas químicas de la isla San José fue tema recurrente durante el siglo pasado de negociaciones que no prosperaron y que quedaron finalmente estancadas en 2003.
El director general de Análisis Antiterrorista, Tomás Cabal, y el embajador panameño en Holanda, José Terán, se reunieron en La Haya en abril pasado con representantes del Departamento de Estado y el Pentágono para resolver las diferencias que habían paralizado las negociaciones, de acuerdo a la información oficial.
Las partes llegaron a “este acuerdo, logrado luego de negociaciones al más alto nivel, y que pone fin a un prolongado diferendo que duró casi 70 años”, dijo el canciller Núnez Fabrega.
Resaltó que la remoción del armamento “permitirá que Panamá salga de la lista de la Organización para las Armas Químicas (OPAQ) de países que mantienen este tipo de armas sin detonar”.
“El acuerdo (con Estados Unidos) ratificado por la Cancillería panameña se da en momentos que el tema relacionado con el uso de armas químicas en Siria ocupa la atención mundial”, añadió el canciller.
El diario Panamá América publicó este viernes que Estados Unidos se había negado de forma reiterada a retirar las bombas químicas de esa isla panameña, perteneciente al archipiélago de La Perlas y cercana a Contadora.
Estados Unidos incluso llegó a ofrecer a la presidenta Mireya Moscoso (1999-2004) asesoría y financiamiento para que Panamá asumiera esa tarea a cambio de que exonerara a Estados Unidos de pagar futuras indemnizaciones, de acuerdo al rotativo local.
La misma fuente señala que la organización ambientalista estadounidense Fellowship of Reconcialition “asegura que Estados Unidos disparó miles de bombas químicas en territorio panameño”.
Tomado: tercerainformacion