Para evitar una crisis alimentaria y un alza pronunciada de los precios de la comida en todo el mundo, Estados Unidos debería reducir o suspender temporalmente el mandato del gobierno según el cual el 40% del maíz se destina a la producción de biocombustibles.
Así lo sostuvo hoy el director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), José Graziano da Silva, en un artículo de opinión publicado en el periódico británico Financial Times.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos estima que la producción de maíz de este año será la más baja en seis años debido a la sequía que afecta a su territorio.
Si a eso se suma la alta cuota asignada a la producción de etanol, el resultado es escasez y precios altos en ese grano, que se reflejan, a su vez, en los precios de otros cereales y afectan a la población más pobre en todo el mundo.
"Una suspensión temporal inmediata del mandato [referente a la producción de etanol] daría un respiro al mercado y permitiría que una mayor parte de la cosecha se destinara a usos alimentarios", escribió Graziano.
El titular de la FAO señaló que la situación actual, si bien precaria, aún no alcanza niveles de crisis, pero advirtió que los riesgos son altos y que una reacción inadecuada podría elevar el panorama a niveles de emergencia.
Tomado: Agencia Prensa Rural