Los movimientos sociales de Colombia insisten en una participación directa en las negociaciones de paz, dijo aquí Marylén Serna Salinas, vocera de la Minga Social y Comunitaria y del Congreso de los Pueblos de ese país.
La mesa de negociación actual plantea la salida al conflicto armado, sin embargo, es importante plantear un proceso de paz integral y estratégico, es decir con amplia participación de la sociedad, dijo Serna en una entrevista con el portal amerika21.de.
Según la activista son los movimientos de base los "que construyen las alternativas concretas para la superación del conflicto social, económico, cultural que desde hace mas de 50 años sufre el pueblo colombiano".
El avance mas importante es sentar a la mesa a dos actores del conflicto y generar en el país la expectativa de un proceso de paz, dijo Serna durante una visita en Berlín, al subrayar la necesidad de la participación del Ejército de Liberación Nacional ELN.
Serna dijo entender que el presidente Juan Manuel Santos inició el diálogo de paz a pesar de haber defendido una política militar frente a la guerrilla.
"No es una sorpresa porque el gobierno de Santos ha abierto las fronteras del país al capital internacional para la explotación de los recursos naturales", agregó.
Por ello, apuntó, requiere un proceso de paz que disminuya la presión del conflicto armado para la entrada de las multinacionales a las distintas regiones del país.
"El proceso de paz, visto desde el gobierno, plantea básicamente la construcción de una tranquilidad para la implementación de los tratados de libre comercio, la apropiación de los recursos naturales y de los territorios", añadió Serna, después de haberse encontrado con varias organizaciones alemanas.
En opinión de la activista, "se debe plantear un proceso de paz integral que, por un lado, busque la salida al conflicto armado y, por otro, genere las condiciones y espacios para debatir una agenda social."
Esta agenda debe incluir propuestas para alcanzar la superación de la pobreza, la perdida de la democracia, la intervención internacional en lo militar, económico y cultural, expresó.
Por eso, se reclama al gobierno la voluntad política para que los movimientos sociales formen parte del proceso de paz con un rol protagónico, con una agenda propia y con garantías para la participación, concluyó.
Tomado: Prensa Latina
