Este medicamento –único en el mundo- evita la amputación de los pies a algunas personas diabéticas. Solo en EE.UU. hay 70.000 amputaciones anuales por esta causa.
Como era de esperar, Joe García está pagando el castigo por su herejía: la de proponer levantar un poquito el bloqueo a Cuba.
Los congresistas Ileana Ros-Lehtinen y Mario Díaz-Balart le han atacado sin piedad, y en radios y televisiones de Miami ya aparecen todo tipo de supuestos “expertos” que desmienten las bondades del citado medicamento cubano.
Y es que la propuesta de este congresista demuestra varias cosas: una, que, contra todas las campañas, la salud pública cubana tiene un gran prestigio internacional; dos, que la inversión en investigación biotecnológica de Cuba está dando resultados espectaculares; y tres, que el pueblo de EEUU -si no existiera el poderoso lobby mafioso de Miami- podría también beneficiarse de los avances científicos cubanos.
Lástima que esta iniciativa de Joe García no pase de un mero escándalo político reflejado en la prensa de Miami. Porque, si los grandes medios de EEUU publicaran que sus leyes impiden que 70.000 personas no sufran amputaciones, ¿no creen que habría algo más que un brote de indignación contra el absurdo bloqueo a Cuba?
(*) Basado en un texto de Edmundo García - La Tarde se Mueve / Blog “La pupila insomne”.
Tomado: Tercerainformacion.es
