El exvicepresidente de Sudán del Sur, Riak Mashar informó este martes que "está listo para respetar de inmediato" el alto el fuego impuesto hace cuatro días por los países de África Oriental para "poner fin al derramamiento de sangre" en esa nación.
De igual modo, expresó estar dispuesto a negociar con el Gobierno de Yuba en Etiopía, donde ambas partes enviarán delegados.
"Estamos listos para respetar un alto el fuego inmediato con el fin de detener el derramamiento de sangre", aseguró Mashar en un comunicado.
Pese a que todavía en algunos sectores del país se seguía combatiendo, el Gobierno de Sudán y la facción rebelde liderada por el exvicepresidente Riek Machar llegaron a un acuerdo este martes para detener las hostilidades, decretar un alto al fuego y comenzar una mesa de negociaciones para alcanzar un acuerdo.
El presidente Salva Kiir Mayardit y el doctor Riek Machar acordaron el cese de hostilidades y nombraron negociadores para desarrollar e implementar un cese al fuego supervisado”, señala el comunicado.
Al respecto, el enviado especial del bloque de naciones de África del Este, la Autoridad Intergubernamental de Desarrollo (IGAD por su sigla en inglés), a Sudán del Sur, el general Lazaro Sumbeiywo, felicitó a Kiir y Machar por dar este paso.
“Las conversaciones se centrarán en un alto el fuego vigilado y seguido por un diálogo destinado a resolver los problemas políticos subyacentes que desembocaron en la actual confrontación”, dijo Sumbeiywo.
Este conflicto comenzó luego de que grupos militares opositores intentaron tomar por la fuerza la sede del Ministerio de Defensa de Sudán del Sur y un almacén de armas en la capital Yuba. Desde entonces, los enfrentamientos han causado más de mil muertos y 63 mil refugiados, de acuerdo con cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
El mismo ha sido calificado por el mandatario sursudánes, Salva Kiir, como un intento de golpe de Estado por parte su exvicepresidente, Riek Machar, luego de su destitución.
El pasado viernes llegaron los primeros refuerzos de la misión humanitaria de las Naciones Unidas, luego de que el Consejo de Seguridad aprobó el envío de seis mil “cascos azules” para resguardar a los refugiados del conflicto y proteger al personal de la organización que allí labora.
Tomado: TeleSur