El proyecto consiste en convertir unos 1000 kilómetros cuadrados de las tierras palestinas ocupadas por Israel en un parque para los colonos. El área se extiende desde la ciudad de Al-Quds (Jerusalén), en la Cisjordania, hasta el mar Muerto, informó el miércoles el Centro de Información Palestino.
El proyecto, considerado uno de los mayores robos de tierras palestinas por parte del régimen de Tel Aviv en décadas, puede modificar tanto la demografía, como la estructura geográfica y política de la región, además de que puede bloquear la posibilidad de establecer un Estado palestino independiente en el futuro, advierte el informe.
Desde que asumió el cargo en junio del año pasado, el primer ministro israelí, Naftali Bennett, ha estado expandiendo rápidamente los asentamientos ilegales, y acelerado la demolición de las viviendas y estructuras palestinas en Cisjordania.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) ha condenado las actividades de asentamiento de Israel en varias resoluciones, y advertido que edificar colonias en zonas ocupadas son “ilegales” según el derecho internacional.
Tomado: tercerainformacion