Una encuesta del Programa Mundial de Alimentos (PMA) reveló que en marzo la mitad de los hogares en este país árabe no pudieron satisfacer sus necesidades mínimas de comida.
Sin embargo, lamentó que debido a la falta de fondos se redujo la asistencia humanitaria desde principios de año.
Ante esa situación, el PMA se vio obligado a entregar a ocho millones de personas raciones reducidas en cada ciclo de distribución, mientras que cinco millones que viven en áreas de máxima preocupación recibieron las cuotas completas.
La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja destacó recientemente que 17,8 millones de personas carecen en este país de acceso a agua potable y servicios de saneamiento adecuados, y 21,9 millones no tienen atención médica básica.
“Si bien la crisis en Yemen es una de las más graves, provocada por un conflicto prolongado, sequías e inundaciones intensificadas por la crisis climática, el Covid-19 y otras enfermedades, no ha logrado atraer el apoyo adecuado de los donantes durante años”, lamentó la institución.
Según la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, al menos 377 mil personas murieron como consecuencia directa o indirecta del conflicto.
La guerra comenzó en 2014, cuando los rebeldes hutíes se levantaron en armas y ocuparon grandes extensiones del país, incluida Saná, la capital.
Al año siguiente una coalición árabe, encabezada por Arabia Saudita, intervino en el conflicto en respaldo del entonces mandatario Abd Rabbu Mansour Hadi, quien recientemente entregó el poder al nuevo Consejo de Liderazgo Presidencial.
Tomado: tercerainformacion