El enfrentamiento por disputa territorial entre bandas de narcotraficantes obligó a 529 familias del municipio de Buenaventura, en el sureño Valle del Cauca, a desplazarse hacia la Alcaldía en busca de amparo.
Según reportes oficiales, grupos criminales encapuchados y armados con fusiles patrullan desde hace una semana las comunas tres y cuatro con salida al océano Pacífico, devenido ruta marítima para el trasiego de alcaloides.
Desde allí salen las lanchas cargadas de cocaína con destino al norte del continente certificaron autoridades locales.
El personero de la ciudad, Alvaro Martán, señaló que la mayoría de las familias esperan ayuda en la sede del Gobierno municipal y otras buscaron refugio temporal en las casas de familiares, tras padecer durante casi una semana la presión de los ataques entre los narcos.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo detalló que una buena parte de los desplazados pertenecen al barrio Los Nayeros, ubicado en la cordillera del Pacífico y llamado así por la procedencia de sus habitantes, sobrevivientes de la masacre del río Naya, en 2001.
En Colombia la cifra de desplazados por la violencia oscila entre cuatro y cinco millones, según datos del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados.
Tomado: Prensa Latina