El extremismo de derecha se está haciendo un hueco en el Ejército alemán. Esta es solo una de las dificultades que afrontan las Fuerzas Armadas federales. Tampoco se libran de problemas organizativos y de casos de abusos sexuales. Los números dibujan una perspectiva optimista, pero está por ver si se materializa.
Las cifras son alarmantes: solo en 2019 se registraron 360 casos nuevos de extremismo entre los militares después de que comenzaran los sondeos para controlar un problema que no deja de crecer. El jefe del Servicio de Contraespionaje Militar alemán (MAD), Christof Gramm, se muestra preocupado por la situación:
"Actualmente estamos tratando unos 20 casos de extremismo de derecha solo en el Mando de Fuerzas Especiales (KSK), mientras que a principios de 2019, la cantidad apenas llegaba a la mitad de esa cifra", ha advertido Gramm.
Este problema no hace sino empeorar la ya de por sí deteriorada situación en la que se encuentra el ejército alemán. Hay problemas endémicos de producción, las tasas de disponibilidad de los sistemas de armas están por los suelos y, además, hay constancia de abusos serios dentro del cuerpo del Ejército, incluidos los abusos sexuales de miembros entre ellos.
Tal y como ha informado Military Watch, todo apunta a que Alemania va a superar a Rusia en gasto de defensa para el final de esta década, especialmente a la luz de la decisión de Moscú de recortar el presupuesto militar.
El presupuesto alemán en defensa alcanzará, según lo previsto, los 70.000 millones de dólares para 2030, en concordancia con el aumento generalizado de presupuesto en esta materia que se observa en los países de Europa occidental. No obstante, está por ver si ese aumento en el gasto militar se traducirá en un mayor rendimiento de un ejército que, por ahora, no es suficientemente eficiente.
Tomado: tercerainformacion