Decenas de miles de franceses han vuelto a hacer huelga y a salir a la calle en diferentes ciudades del país para protestar contra la reforma del sistema de pensiones, que retrasa la edad mínima de jubilación de los 62 a los 64 años. Esta es la tercera jornada de movilización y coincide con la llegada del proyecto de ley a la Asamblea Nacional, donde la oposición afila sus cuchillos contra el principal proyecto del segundo mandato de Emmanuel Macron.
«Salvo que se haya vuelto totalmente autoritario, en una democracia, en algún momento, alguien tiene que ser razonable y necesariamente es él quien tiene que volverse razonable, ya que él es el responsable de haber creado este conflicto desde cero«, declaraba Jean-Luc Mélenchon, líder de La France Insumise.
Tomado: tercerainformacion