El presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, afirmó este domingo que el continente se toma en serio la inversión en la paz, al clausurar el ejercicio militar Amani África II en la provincia de Northern Cape.
Las maniobras, desarrolladas en el campo de entrenamiento de Lohatla (más de 870 kilómetros de Pretoria), fueron organizadas por la Unión Africana (UA) y contaron con la participación, desde el pasado 19 de octubre, de más de 5 400 soldados, policías y civiles de los países de la región, reportó PL.
A menudo hemos expresado que queremos soluciones africanas a los problemas africanos, subrayó Zuma al expresar que con este ejercicio “estamos demostrando la disposición a resolver nuestros problemas”.
A partir de estos esfuerzos, “los habitantes de la República Centroafricana, Sudán del Sur, Mali, Libia, Somalia y la República Democrática del Congo siguen viviendo con la esperanza de lograr la paz”.
El mandatario reiteró el compromiso de “silenciar las armas en nuestro continente en el 2020 en correspondencia con los objetivos de la agenda del 2063” e indicó que Sudáfrica seguirá cooperando con las Naciones Unidas.
Los ejercicios —que calificó de exitosos— pusieron a prueba el estado de preparación de la Fuerza de Reserva Africana, cuyos soldados podrían ser desplegados en misiones de paz el próximo mes.
El entrenamiento “ha contribuido significativamente a la consolidación de las relaciones positivas, no solo entre las diferentes Fuerzas Armadas, la policía y los componentes civiles que estuvieron involucrados, sino también entre los países de origen de estas fuerzas”, reconoció el presidente.
Sudáfrica acogió este ejercicio militar en nombre de la Comunidad de Desarrollo de África Austral y es el mayor que se ha realizado aquí desde 1994.
Tomado: Granma