La viuda del dictador Augusto Pinochet y presidenta vitalicia de la fundación Cema-Chile, Lucía Hiriart, declaró este miércoles durante dos horas como imputada ante la justicia por corrupción.
Hiriart, de 94 años, debió comparecer ante el juez Guillermo de la Barra, que investiga la presunta apropiación de bienes del Estado y malversación de fondos de la fundación Centro de Madres de Chile (Cema).
De acuerdo con el Ministerio de Bienes Nacionales, Cema-Chile recibió en el período de la dictadura (1973-1990) alrededor de 135 inmuebles de forma gratuita junto con terrenos fiscales, con los cuales Hiriart amasó una gran fortuna al venderlos.
Algunos inmuebles ya fueron recuperados por el Ministerio de Bienes Nacionales, que cree Cema-Chile se hizo de millonarias sumas de dinero por la venta de propiedades del Estado.
El interrogatorio a Hiriart se realizó en su domicilio, en el barrio de lujo La Dehesa, en esta capital, y fue encabezada por el juez De la Barra, de la Corte de Apelaciones de Santiago.
La viuda de Pinochet fue designada durante la dictadura presidenta vitalicia de Cema-Chile, puesto al cual se vio obligada a renunciar hace poco ante las acusaciones en su contra.
A propósito del hecho, la ministra de Bienes Nacionales, Nivia Palma, señaló que el juez está convencido de que se debe aclarar qué pasó con los inmuebles y terrenos entregados a Cema Chile.
Se busca saber si los dineros por los arrendamientos a terceros ‘efectivamente ingresaron a la cuenta de la fundación o ingresaron a las cuentas propias de la señora Lucía, precisó la secretaria de Estado.
Palma, en conversación con periodistas, hizo un llamado a la familia Pinochet, ‘para que en un acto republicano entreguen esos inmuebles al Fisco y Bienes Nacionales en un trámite muy rápido’.
Si ello no ocurre, advirtió, el trámite lo vamos a hacer igual para recuperar estos inmuebles para el Estado y para Chile.
Hiriart estuvo acompañada en su declaratoria por su hijo menor, Marco Antonio Pinochet; su abogado, Pablo Rodríguez, y por su médico de cabecera.
Además de las pesquisas sobre el uso indebido de los inmuebles del Estado y el enriquecimiento ilícito, el magistrado investiga también 50 mil dólares sacados de la Tesorería de la Fundación para financiar gastos con la detención de Pinochet en Londres.
El juez español Baltasar Garzón buscaba extraditarlo y procesarlo por crímenes de lesa humanidad. Por esta razón, Pinochet estuvo 17 meses preso en Londres, de 1998 a marzo de 2000.
Sin embargo, el Gobierno británico decidió devolverlo a Chile ‘por razones humanitarias’.
Tomado: Prensa Latina