El regional Miguel Ángel Rueda del Partido Comunista Colombiano, y el equipo de reconstrucción Jennifer Osorio de la Juventud Comunista, se permite denunciar públicamente que el día 5 de julio del presente año en horas de la madrugada se pudo evidenciar que un hombre ingreso de manera ilegal a nuestra sede política en altas horas de la noche, aproximadamente de una a dos de la madrugada, mientras que al mismo tiempo se encontraba un automóvil de la marca Renault Logan con luces apagadas rondando de manera sospechosa nuestra sede política.
Informados de los hechos procedimos a revisar las instalaciones de nuestra sede política, sin que se hubieran presentado hurtos, sustracción de documentos o daños materiales, lo cual nos ha generado mayor desconfianza en relación con los objetivos perseguidos por quien violento la sede política, considerando que pueda tratarse de seguimientos ilegales a las actividades políticas, posibles acciones de interceptación ilegal de información y tentativa de sustracción de documentos, que se vieron frustradas por la acción de personas que se percataron de lo ocurrido y dieron aviso del hecho.
Este tipo de actividades ilegales a las sedes de nuestro partido político en el territorio nacional ha sido reiterativa en tiempos pasados recientes, formando parte de la acción de grupos violentos con claros tintes antidemocráticos y de ultraderecha, por lo que alertamos y hacemos un llamado urgente a las autoridades estatales, para que dentro del marco de sus competencias brinden todas las medidas de seguridad sobre nuestras sedes políticas y a cada uno de nuestros militantes y dirigentes, de manera que puedan desarrollar sus legítimas actividades proselitistas en un marco pleno de garantías y materialización del derecho a la participación política, como lo dispone la constitución política y los tratados internacionales de los cuales el estado colombiano es parte.
Este hecho se suma a los problemas de seguridad, que vienen ocurriendo contra destacados militantes del regional Miguel Ángel Rueda del Partido Comunista Colombiano desde el año 2019, donde fueron objeto de seguimientos, intento de ingresos a sus correos personales y redes sociales, ingreso ilegal en horas de la madrugada a sus lugares de residencia, y hurto de computadores personales en sus lugares de trabajo y residencias, así como el intento de soborno a una de nuestras integrantes de la Juventud comunista a cambio de brindar información sobre las actividades que realizamos en nuestra sede política, estableciéndose que se trató de un supuesto integrante de la Fuerza Pública quien afirmó que: “en nuestras instalaciones adoctrinamos Jóvenes”, hechos que se encuentran debidamente denunciadas ante la Fiscalía General de la Nación, sin que hasta la fecha se conozca resultado alguno al respecto.
Nos preocupa inmensamente la continuidad de la persecución contra nuestro colectivo partidario, inaceptable, rechazable y condenable en un Estado que presume ser democrático y pluralista, recordando que nuestra militancia y partido político ha sido víctima del genocidio perpetuado por el Estado en contra de la Unión Patriótica, del cual formamos parte desde 1985, violencia y represión liderada en muchos casos por agentes del estado, con la connivencia y el apoyo de sectores económicamente poderosos apoyados en fuerzas paramilitares ilegales e inconstitucionales, como lo fue el plan denominado el Baile Rojo, que en el caso de Norte de Santander cobro la vida de muchos de sus mejores dirigentes y en otros casos fueron amenazados, compelidos por la fuerza de la violencia a desplazarse, además de ser víctimas de torturas, detenciones arbitrarias, seguimientos y acosos de todo tipo, destacando el asesinato de nuestros camaradas RAMON ANIBAL DIAZ presidente de la UP en Norte de Santander y luego el asesinato del Secretario Político del regional del PCC. CARLOS SALVADOR BERNAL, entre muchos otros casos que hoy continúan en total impunidad.
Hacemos un llamado urgente a la comunidad internacional, especialmente a las oficinas y delegaciones de las Naciones Unidas, y demás organizaciones internacionales que hacen presencia en la región y a todas las organizaciones de derechos humanos, sindicales, cívicos y comunitarias para que nos acompañen en este proceso de denuncia e investigación y se realice el monitoreo de tan graves hechos aquí denunciados.
Exigimos a la fiscalía general de la nación que de inmediato inicie las investigaciones pertinentes y conducentes, de manera exhaustiva sobre hechos denunciados por nuestro partido político, para que se dé con los responsables de estas arbitrariedades y reciban el castigo merecido, para lo cual pedimos que estas investigaciones cuenten con el acompañamiento integral del Ministerio Público en cabeza de la Procuraduría General de la Nación y de la Defensoría del Pueblo.
DIRECCION REGIONAL DEL PARTIDO COMUNISTA COLOMBIANO
JUVENTUD COMUNISTA - EQUIPO DE RECONSTRUCCIÓN JENNIFER OSORIO
Tomado: Tercerainformacion