La pregunta surge después de escuchar las declaraciones que el ex presidente Álvaro Uribe dijera sobre la condena que recibió uno de sus mejores funcionarios Jorge Noguera ex director del DAS, quien puso al organismo de seguridad al servicio del paramilitarismo. Según Uribe este funcionario actúo a sus espaldas y le oculto información. Sin embargo, parte de la información que este organismo recogía de forma ilegal Uribe la utilizaba con el fin de desprestigiar a quien consideró eran sus opositores. El escándalo de las chuzadas; interceptaciones y seguimientos ilegales realizados por el DAS, a personalidades de la vida pública entre ellos a magistrados, periodistas, políticos, abogados y miembros de ONG, entre otros.
En este mismo periodo se conocieron los mal llamados “falsos positivos”, jóvenes de extracción humilde asesinados por el Ejército Nacional y mostrados como positivos dados de baja en combate. Después, que se conociera parte de dicho escándalo, el presidente de ese entonces informo que fue engañado por sus subalternos de la rama militar, es de entender, que los delitos que se cometieron no comprometen a un organismo en particular sino que son investigados de forma individual, así en el ejército exista una línea de mando y un ministerio encargado de planear y diseñar las operaciones militares.
Por otro lado, gran parte de la coalición Uribista, se ha visto involucrada por tener nexos, alianzas, contubernios, acuerdos con grupos paramilitares (refundar la patria), la llamada “parapolítica”, que involucra de forma directa al primo del presidente y a sus más cercanos colaboradores; sin que dicho escándalo comprometa de forma directa al ex presidente, por el contrario el ex presidente considera que estos casos no comprometen su presidencia y son sólo casos aislados que quieren desprestigiar su gobierno.
Los enfrentamientos con la Corte Suprema de Justicia, y en particular el llamado “caso Tasmania.” El paramilitar alias “Tasmania,” quien había asegurado que un magistrado de la Corte le había ofrecido beneficios judiciales a cambio de implicar al presidente Uribe en un atentado, se retractó asegurando que todo había sido orquestado por presiones de un ex paramilitar (alias “el Tuso”) en supuesta coordinación con Mario Uribe, y de Santiago Uribe, hermano del presidente.
La forma como el gobierno presento una de sus políticas bandera para el agro. El Agro Ingreso Seguro en el que se les otorgaban subsidios no reembolsables a familias campesinas, con el fin de desarrollar proyectos agrícolas. Sin embargo, el ministerio de agricultura desvío el capital y lo entrego a las familias más ricas, en cabeza del ministro Arias, quien desvió parte del dinero para su campaña; según lo ha establecido la fiscalía. Es de anotar que ningún ente de control se dio cuenta de lo ocurrido, lo que se puede prever es que este ministerio actúo de forma soterrada frente al gobierno.
El caso de la falsa desmovilización de un frente guerrillero; el alto comisionado para la paz, mostro como parte de la política de gobierno la desmovilización de 66 guerrilleros miembros del frente Cacica la gaitana. Pese a esto, la fiscalía estableció que se trato de un montaje, en el que se pagaron $500 mil a cada falso desmovilizado entregados por un narcotraficante. Esta desmovilización no podría entenderse sino en el marco de la “política de seguridad democrática” los logros del presidente.
Aunque después de la administración Uribe Vélez, han surgido un sinnúmero de escándalos que comprometen de forma directa su gobierno, no nos vamos a detener en ellos, no porque consideremos que son casos aislados, sino porque los medios de comunicación ya los han presentado y no es la intensión de este articulo, eso se lo dejamos a los organismos que imparten justicia en Colombia.
Crisis del Estado Colombiano
Esta crisis se plantea, cuando el Estado entendido como ente regulador de la sociedad no respeta la división de poderes y tiende a concentrar el poder en la cabeza del presidente, carece de autoridad sobre su equipo o no tiene control sobre las instituciones que lo conforman, para este caso hacemos referencia a los ministerios y organismos de seguridad como el DAS, las Fuerza Pública; pues, gran parte de lo que allí se impartió el gobierno dice no conocer.
Otro de los elementos que permiten demostrar la crisis del Estado colombiano, es la incapacidad de resolver de forma pacífica el conflicto armado. En la administración pasada lo que se dejó claro fue la agudización y la política de guerra en contra de las FARC. Para ello fue necesario fortalecer la fuerza pública designándole gran parte del presupuesto nacional en detrimento de la salud, educación, vivienda para los sectores más desprotegidos.
Al analizar la serie de delitos cometidos en este periodo por organismo que hacen parte del Estado y entendiendo que se cometieron a espaldas del presidente según lo que él ha manifestado. Se puede decir, que la incapacidad del presidente generó un vacío de poder, que fue copado por subalternos suyos quienes crearon micro poderes autónomos, que actuaron en nombre del Estado, pero a beneficio propio con organizaciones criminales. Estos hechos explicaría también su paso por la gobernación de Antioquia, su incapacidad le impidió luchar contra la delincuencia y por ello dio vía libre a las convivir, cuna del paramilitarismo en estas zonas, con el argumento de luchar contra los criminales, convirtió el departamento en una máquina de guerra, que hasta hoy no ha dejado de producir masacres.
De otra forma no se entendería el por qué del desconocimiento del presidente, o fue que su administración estuvo rodeada por delincuentes que posaron como profesionales honestos y de buenas familias. Es de aclarar que en Colombia el presidente nombra a quien le da la gana, no existen canales administrativos que estudien las hojas de vida. Es decir, el presidente se rodea de sus más cercanos amigos, colaboradores, asesores con el fin de formar un equipo de trabajo.
Otro de los interrogantes que surge es: ¿a quién beneficiaba la información obtenida de forma ilegal? (caso chuzadas). Tenemos claro que todas las víctimas de este periodo tuvieron algo en común; líderes de izquierda y opositores del gobierno, lo que demuestra que no son hechos aislados, sino parte de una estrategia que buscó eliminar la oposición ya sea con las armas, el desprestigio, amenazas, intimidación, como parte de un proyecto político.
Sí bien, el presidente desconoció gran parte de la actuación de sus subalternos y no tenemos porque no creerle, él mismo se ha encargado de manifestar que gobernó con “transparencia”, entonces lo que se evidencia es que el presidente se mantuvo ocupado en otras actividades por ejemplo atendiendo sus finquitas, buscando broncas con los vecinos (Chávez y Correa), atendiendo invitaciones de Bush (diplomacia meliflua), atendiendo periodistas, tomando tinto en sus yeguas, lanzándose desde un tobogán, trotando en cualquier lugar, luchando sin descanso contra LAFAR, recibiendo invitados en la casa de Nari.
Para terminar, se puede decir que el planteamiento del cual partió esta reflexión, a saber: No tenemos la certeza de quien gobernó el país, teniendo en cuenta que Uribe Vélez ha marcado una distancia entre los hechos que comprometen a sus funcionarios y él, a sabiendas que la responsabilidad política es solamente del jefe de Estado quien se comprometió con los colombianos a administrar de forma honesta el mandato que le otorgaron.
Resulta paradójico que Uribe el hombre fuerte y más popular que enfrento a la guerrilla sin descanso y que además, una de sus consignas fuera trabajar y trabajar, resulto ser víctima de sus funcionarios, quienes le ocultaron información y actuaron por cuenta propia. ¿Dónde estaba el presidente en esos momentos? O ¿los consejos comunales ocuparon gran parte de su tiempo? que nunca supo las andanzas de sus hijos, mucho menos lo que hacían sus ministros y peor aún nunca se entero del quiebre en el sistema de salud, educación, vías, tampoco se imagino que su funcionario estrella, de buena familia por demás, fuera un hampón capaz de entregar parte del Estado a los paramilitares y del ingreso de uno de estos a la casa de Nariño (caso Job). Estos hechos permiten prever que sus funcionarios lo aislaron al darse cuenta de su incapacidad para gobernar; primero la gobernación de Antioquia y luego la presidencia de la república, lo que explicaría el desconocimiento total y el colapso del Estado.