lunes, 17 de abril de 2017

Centrales sindicales brasileñas preparan la huelga general del 28 de abril

La huelga general en preparación para el 28 de abril será la principal batalla contra los ataques del gobierno de Michel Temer a los derechos y conquistas populares, afirmó la Central de Trabajadores de Brasil (CTB).
‘Cada día en el país se verifica un nuevo golpe contra las conquistas del pueblo brasileño, pues el gobierno ilegítimo de Michel Temer, incluso sin apoyo popular, insiste en cortar derechos’, señaló la organización sindical en un comunicado suscrito por su presidente nacional, Adilson Araújo.
En el actual escenario -subraya el texto- las reformas del sistema de pensiones y laboral junto a la aprobada ley de tercerización sin límites constituyen ataques frontales a la clase trabajadora.
La huelga general del venidero 28 de abril es organizada por el Fórum de las Centrales Sindicales y los frentes Brasil Popular y Pueblo Sin Miedo.
Estos últimos dieron a conocer también este miércoles un llamamiento en el cual afirman que ‘nos estamos aproximando a una batalla decisiva en la lucha contra el golpismo’ y remarcan que el futuro de las jubilaciones y del acceso a derechos básicos de millones de brasileños depende del triunfo de esa acción.
Si tenemos éxito (en la huelga general) esa fecha podrá convertirse en un parte-aguas ‘inaugurando un nuevo ciclo en la política brasileira, en el que las fuerzas progresistas salgan definitivamente de la (posición) defensiva’, enfatiza el documento.
Orienta además que, aunque el escenario para llevar adelante esa acción es favorable, resulta necesario intensificar el trabajo de diálogo con la sociedad para convertir el amplio rechazo al gobierno golpista en paralización y movilización popular.
Por otra parte, la Central Unica de los Trabajadores (CUT) dio a conocer en un boletín que al paro se sumarán también los sindicatos y federaciones del sector de transporte, entre los cuales -dijo- existe gran unidad y determinación para movilizarse y ‘frenar la devastación hecha por el gobierno’ de Temer contra los trabajadores.
Las paralizaciones de los transportistas, un ramo considerado esencial en la prestación de servicios, respetarán la Ley de Huelga, que asegura ese derecho y a su vez determina asegurar un mínimo de 30 por ciento de atendimiento y hacer una comunicación previa.
El rechazo popular a las reformas impulsadas por Temer alcanzó sus puntos más altos los días 8 y 15 de marzo pasado, cuando más de un millón de personas salieron a las calles para manifestar su repudio a la que consideran una ofensiva indiscriminada contra derechos conquistados por los brasileños durante décadas de lucha.
Tomado: matrizur.org