Una operación militar del Ejército de Colombia dejó a un joven indígena muerto y otro herido, en la zona rural de Jamundí, en el Valle del Cauca, dejó en lo que algunos testimonios señalan como una ejecución extrajudicial.
Las víctimas fueron identificadas como Omar Gusaquillo y Diego Alexis Vega, quienes formaban parte de la Guardia Indígena de vigilancia rural nocturna, que garantiza la protección ante el robo de ganado en la zona rural de Jamundí, al suroeste de Colombia.
Según el testimonio de Diego Alexis Vega, el herido, cuando los jóvenes se preparaban para darse un aseo personal en una casa, fueron sorprendidos por elementos de la Tercera Brigada del Ejército, quienes les gritaron: "¡Quietos, manos arriba!".
Asustados por la sorpresa Omar respondió: "No disparen, estamos desarmados. Somos de la Guardia Indígena". Después de haberse identificado, el Ejército comenzó a dispararles, pese a que tienen jurisdicción en esta zona rural.
Vecinos de la zona dijeron que el Ejército trató de montar un "falso positivo", como ya se hacía bajo el Gobierno de Álvaro Uribe (2002-2006 y 2006-2010), cuando miembros del Ejército presentaban como guerrilleros 'dados de baja en combate' a jóvenes asesinados extrajudicialmente.
"Vuelve la zozobra de muertes, amenazas, al territorio colombiano, en especial al Valle del Cauca", denunció la Organización Regional Indígena del Valle del Cauca (Orivac) en un comunicado, en el que también acusa al Gobierno de Iván Duque de su falta de compromiso con los acuerdos de paz firmados en La Habana, Cuba, con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo (FARC-EP).
Tomado: Tercerainformacion