“Ofreciendo un nuevo diálogo a Irán, Estados Unidos busca imponer sus demandas a la nación persa e ir más allá en su política de máxima presión contra este país”, ha denunciado este martes el ayatolá Seyed Ali Jamenei.
Para el Líder de la Revolución Islámica de Irán, “el diálogo es un truco” y a través del mismo, Washington quiere demostrar que su campaña de máxima presión contra Teherán funciona. Sin embargo, esta “carece de valor” y fallará, ha subrayado.
Ha cuestionado también la postura contradictoria de las autoridades estadounidenses ante el diálogo con la República Islámica. “Unas veces ofrecen una negociación sin precondiciones a Irán, y otras plantean 12 condiciones para ello. Esto muestra el desorden político en la Casa Blanca o es un truco para confundir a la contraparte, aunque no pueden hacerlo con Irán”, ha insistido.
El domingo, el presidente estadounidense, Donald Trump, volvió a no descartar la posibilidad de una reunión con su homólogo iraní, Hasan Rohani, a finales de este mes al margen de la Asamblea General de Naciones Unidas (AGNU) en Nueva York, Estados Unidos.
El magnate norteamericano hizo el anuncio mientras ha aplicado una política de máxima presión contra Teherán desde que sacó a su país de un acuerdo multilateral sobre el programa nuclear iraní en un intento vano para obligar a Teherán a renegociar el pacto.
El ayatolá Jamenei ha condicionado el diálogo con Washington al hecho de que este último vuelva a cumplir el acuerdo ya vigente, conocido oficialmente como el Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés).
“En caso de que EEUU retroceda (los pasos dados anteriormente) y regrese al convenio que violó el año pasado, entonces puede reunirse con Irán y otros socios del pacto, de lo contrario no habrá ninguna negociación entre Irán y Estados Unidos a ningún nivel, ni en Nueva York ni en cualquier otro lugar”, ha advertido el Líder iraní.
El ayatolá Jamenei ha instado a las autoridades persas a emplear “las capacidades internas” para resolver los problemas del país y a evitar depender de Estados extranjeros. “Esto, sin embargo, no significa cerrar las puertas de diálogo con el mundo. Nosotros saludamos las conversaciones con otros, pero no dependemos de nadie”, ha zanjado.
Tomado: tercerainformacion
