“Una democracia imperfecta es mejor que una dictadura”, comentó el diario sobre aquel gobierno cuya existencia fue “la más prolongada y oprobiosa del país, sostenida por la trilogía Gobierno, Fuerzas Armadas, Partido Colorado, y derribada por un golpe de Estado el 2 de febrero de 1989”.
La publicación inventarió los horrores de aquel proceso iniciado el 4 de mayo de 1954, y calificó de despiadada aquella autoridad “que violó los derechos humanos de los paraguayos, torturó, asesinó, desapareció y exilió a miles de compatriotas, sin reconocer libertades”.
Última Hora reseña un informe de la Comisión de Verdad y Justicia sobre los 35 años de “stronismo”, que recoge 19.862 detenidos, 18.772 torturados, 20.814 exiliados, 459 desapariciones forzadas y 128.076 víctimas directas e indirectas de aquella asonada militar.
“Como evaluación de estas más de tres décadas no puede ignorarse –admitió el diario- que hubo avances importantes en cuanto al reconocimiento de derechos civiles y políticos, y debe valorarse la vigencia de libertades de expresión o de reunión, inexistentes durante la dictadura stronista”.
Pero -recuerda Última Hora- “no cambió la realidad política y en estos 35 años resalta el déficit de cultura ideológica, sin la cual la democracia siempre se ve incompleta. Y aquí radica la mayor derrota, pues para cambiar la cultura política la apuesta debió ser, fundamentalmente, por la educación”.
Durante la etapa democrática, además –opina el diario- “vivimos una situación de atraso en cuestiones fundamentales como el derecho al acceso a la salud y educación públicas de calidad, así como de dificultades de acceso al empleo digno, beneficios sociales y servicios públicos eficientes”.
Según el periódico, “la clase política tiene una deuda, porque fue cómplice de nuestra falta de memoria, y recordemos que un pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla, por lo que debemos ratificar el compromiso ciudadano con la democracia, la justicia, la igualdad y el Estado de derecho».
Tomado: tercerainformacion