“No permitiremos que nadie viole nuestro espacio aéreo. He ordenado a la PAF (Fuerza Aérea de Pakistán) derribar los drones, incluyendo los de EEUU, que entren en nuestro espacio aéreo, violando la soberanía e integridad territorial del país”, dijo el jefe de la Fuerza Aérea, mariscal Sohail Aman, en un discurso en Islamabad, informó el periódico The Times of India.
La orden es vista como un cambio de la política anterior de Pakistán, la cual solía censurar públicamente los ataques con drones estadounidenses en su territorio, pero sin amenazar con derribarlos.
El anuncio se produjo dos semanas después de que un drone estadounidense atacara un supuesto complejo militante en la región tribal de Pakistán, cerca de la frontera afgana, matando al menos a tres personas.
EEUU ha estado utilizando drones para realizar vuelos de vigilancia y ataques aéreos en Pakistán desde que Washington y sus aliados invadieron el vecino Afganistán en 2001.
Según datos de la Oficina de Periodismo de Investigación, cientos de civiles, entre ellos mujeres y niños, han muerto en ataques con drones estadounidenses contra objetivos que se consideraban terroristas en Pakistán y Afganistán desde 2004.
Islamabad ha condenado las incursiones de drones estadounidenses en su suelo, describiéndolos como una violación de su soberanía.
Las operaciones de drones de Washington también son muy impopulares entre los pakistaníes, que han realizado numerosas manifestaciones de protesta en los últimos años contra las muertes civiles causadas por tales ataques aéreos
La última advertencia pakistaní se produce en medio de una crisis en las relaciones entre los dos países provocada por una declaración del presidente estadounidense, Donald Trump, en la que calificó de apoyo de Islamabad a los grupos militantes.
Los responsables en Islamabad han rechazado fuertemente las acusaciones y afirman que Pakistán ha hecho un gran esfuerzo para luchar contra el terrorismo.
Trump criticó duramente a Pakistán en agosto, cuando anunció la nueva estrategia de su gobierno para Afganistán. Los comentarios del presidente de EEUU provocaron una indignación entre los dirigentes y el público pakistaníes.
Tomado: tercerainformacion