En un comunicado de conmemoración del aniversario del bombardeo químico cometido por orden del dictador iraquí Sadam Husein en la ciudad iraní de Sardasht (noroeste), el canciller del país persa, Mohamad Yavad Zarif, ha denunciado hoy jueves el “apoyo ciego” que la comunidad internacional brindó al uso por el régimen de Bagdad de armas químicas contra la inocente nación iraní durante ocho años de guerra impuesta a Irán.
A juicio de Zarif, ese apoyo allanó el camino para la posterior repetición de crímenes de lesa humanidad contra las poblaciones civiles de Irak y Siria por parte de grupos terroristas. “Desafortunadamente, los poderes arrogantes repiten los mismos errores en la zona: el suministro de agentes venenosos y armas químicas a bandas terroristas, entre ellos el grupo EIIL (Daesh, en árabe), y su uso por parte de los terroristas en los conflictos internos de Irak y Siria”, ha observado el ministro.
El jefe de la Diplomacia persa ha recordado la responsabilidad de la comunidad internacional en los horrores sufridos por los habitantes de Sardasht el 29 de junio de 1987 y por los de la ciudad kurda iraquí de Halabja (en el norte de Irak) el 16 de marzo de 1988, cuando el mismo dictador hizo perpetrar un horrible bombardeo químico que provocó la muerte de 5000 personas, en su mayoría civiles.
La República Islámica de Irán, gran víctima del uso de armas químicas en su contra, vuelve a condenar el uso de armas de destrucción masiva en cualquier lugar, por parte de quien sea, y reprocha con contundencia el doble rasero aplicado por los Estados occidentales a sus ciudadanos y los pueblos de otros países, así como la politización de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) y el abuso de las atribuciones técnicas del organismo”, ha declarado el canciller iraní.
Asimismo, Zarif ha arremetido contra Estados Unidos por no cumplir las obligaciones que le impone la Convención sobre Armas Químicas (CAQ) y ha señalado que Irán, como miembro activo de la OPAQ, pide a Washington junto a otros miembros de la organización que respete sus compromisos y destruya por completo su arsenal químico bajo supervisión internacional.
A modo de colofón, el diplomático ha culpado a EE.UU. y el régimen israelí de la presencia de la “sombra nefasta” de “armas inhumanas” en la “región sensible” de Oriente Medio y ha instado a la comunidad internacional a castigarlos por los crímenes que han cometido en la zona y garantizar la erradicación de las armas nucleares, biológicas y químicas de que dispone el “régimen sionista, (que es) la mayor amenaza a la seguridad regional y mundial”.
El ataque químico a Sardasht está considerado uno de los peores ataques de ese tipo de la historia; costó la vida a 113 civiles y dejó más de 5000 afectados. De acuerdo con las cifras oficiales, los bombardeos químicos de Irak durante la guerra contra Irán dejaron 2600 víctimas mortales y 107 000 afectados.
Tomado; Tercerainformacion