Colombia reportó, este fin de semana, el asesinato de al menos cinco líderes sociales, resultando uno de los más mortíferos durante la ola de violencia que desde hace meses se mantiene en el país, y que en lo que va de año se ha recrudecido.
Salvador Jaime Durán, líder campesino, recibió el pasado viernes cinco disparos en el departamento Norte de Santander, en el marco de combates entre grupos armados irregulares y el Ejército colombiano.
Por otro lado, Ovidio Baena, militante de Colombia Humana y dirigente de los trabajadores petroleros, sector del que era pensionado, fue ultimado a golpes este sábado en su finca en el estado Bolívar.
También el sábado, fue hallado muerto y con signos de tortura, Javier Uragama, un joven gobernador indígena de la etnia embera. Contaba con 22 años y fue asesinado a tiros en el departamento del Chocó.
Otro caso registrado fue el de Yeffer Yoanny Vanegas, excombatiente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo (FARC-EP), desmovilizado tras la firma de los Acuerdos de Paz; y uno de los líderes de los campesinos que luchan por la implementación del programa de sustitución de cultivos ilícitos.
Vanegas falleció tras recibir impactos de balas, este viernes, en su zona de residencia del departamento de Meta, presuntamente por efectivos del Ejército colombiano, por su participación en las protestas pacíficas que se extendieron desde el 20 de mayo hasta el 11 de junio.
Tomado: tercerainformacion