Una ilegal base militar ubicada en el campo gasífero de Koniko, en el este de Deir Ezzor, a 450 kilómetros de Damasco, recibió un ataque de varios cohetes. Todavía ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del ataque, tampoco se sabe desde dónde se lanzaron los cohetes.
La agresión dejó varios soldados estadounidenses heridos, según reportó la cadena televisiva Al Mayadeen citada por Hispantv, sin ofrecer más detalles sobre posibles víctimas mortales o daños.
La opinión pública muestra esa planta como la mayor base militar que opera el país estadounidense en Siria. Desde ahí se extrae gas para abastecer a las tropas y a los grupos irregulares que operan en el Medio Oriente.
Estados Unidos, indica Hispan TV, implanta instalaciones de este tipo a pesar del rechazo popular y de los gobernantes. Las tribus y clanes de Siria han condenado la presencia de fuerzas militares extranjeras presentes ilegalmente en su territorio, y han convocado a la resistencia popular, incluida la armada, contra estas.
Informes muestran que EE. UU. ofrece, desde sus bases en Siria, entrenamiento militar y apoyo en armas e información de inteligencia a los terroristas con el fin de prolongar la guerra en el país árabe y justificar así su presencia. El Gobierno sirio ha denunciado en reiteradas ocasiones la presencia militar ilegal de EE. UU. en su país.
Tomado: Granma