Iván Márquez, jefe de la delegación de las FARC-EP en las conversaciones de paz con representantes del gobierno colombiano, subrayó en un comunicado la necesidad de la Constitucionalización de la figura del territorio campesino, aparejado de una autonomía política, administrativa, económica, social, y en la administración de justicia.
Es necesario-indicó Márquez-la protección de ecosistemas frágiles, bosques, biodiversidad y fuentes de agua para la sostenibilidad socio-ambiental, y la soberanía alimentaria.
También -agrega el texto de 10 propuestas- debe existir financiamiento estatal mediante transferencias de origen constitucional y recursos del presupuesto, además de dotar este segmento con medios de producción, asistencia técnica, créditos e infraestructura física y social.
El documento puntualiza la necesidad de reconocer y fortalecer las zonas de reservas campesinas y crear las de producción de alimentos.
Además -añadió Márquez- debe promoverse el procesamiento industrial, el encadenamiento productivo, la inserción el mercado nacional e internacional, siempre teniendo en cuenta la protección de los territorios campesinos.
El jefe de la delegación guerrillera reiteró el pedido a las máximas autoridades colombianas de incorporar a Simón Trinidad a la mesa de conversaciones de paz con el Gobierno.
Sabemos -aseguró- que solo se requiere una señal del gobierno que daría confianza sí solicitara a Estados Unidos la facilitación de las condiciones para que Trinidad esté presente con nosotros.
Podrían homologar la pena de 60 años que cumple en el país norteño en condiciones difíciles, para que la misma la cumpla en Colombia, dijo Márquez.
Llamamos al Vaticano, a las organizaciones encargadas de defender los derechos humanos y a la solidaridad mundial para exigir la liberación de Trinidad.
Las partes están inmersas en el cuarto ciclo del diálogo de paz, iniciado en La Habana el 19 de noviembre pasado, bajo el formato de tres días de pláticas y uno de receso, y con el asunto de la tierra como centro del acercamiento para poner fin a décadas de conflicto en el país suramericano.
Además del tema agrario, la agenda acordada por las FARC-EP y el gobierno para el acercamiento incluye la participación política, el fin del conflicto, el problema del narcotráfico, la atención a las víctimas y los mecanismos de refrendación y verificación de lo pactado en la mesa.
Mañana concluirá el presente ciclo y las pláticas serán retomadas el venidero 18 de febrero.
Tomado: Prensa Latina
