Save the Children recuerda que los niños y niñas que sufren esclavitud infantil sufren largas jornadas de trabajo "a cambio de muy poco o nada" y son considerados "como un objeto" por parte de sus empleadores, "quienes los humillan, los somenten a abusos o los venden para que vuelvan a ser explotados". La trata infantil, la explotación sexual con fines comerciales, el trabajo infantil forzoso por endeudamiento, el trabajo forzoso en minas o en la agricultura, losniños soldado, el matrimonio infantil forzoso y la esclavitud doméstica son las formas más frecuentes de esclavitud infantil.
En cuestión de género, se calcula que el trabajo infantil afecta más a niños que a niñas (99,8 millones de niños frente a 68,2 millones de niñas trabajadoras). Pese a todo, subrayan que las niñas "empiezan a trabajar a edades más tempranas, reciben menor remuneración que los niños por el mismo trabajo y sufren una triple carga: realizar trabajos domésticos, seguir con su educación y realizar trabajos remunerados".
Por eso Save the Children, en el Día Mundial contra el trabajo infantil, exige a la comunidad internacional y a la sociedad civil que se implique para acabar con esta lacra, mejorando el acceso a medios de vida dignos e implementando financiación para actividades que permitan la generación de ingresos familiares, proporcionando una educación segura y de calidad, priorizando la erradicación de las peores formas de trabajo infantil e invirtiendo en el fortalecimiento de los sistemas y servicios públicos de protección de la infancia.
Tomado: tercerainformacion