Decenas de palestinos se han atrincherado en la madrugada de este martes en la mezquita de Al-Aqsa, en la Explanada de las mezquitas de Jerusalén, lo que ha llevado a la Policía israelí a declarar el cierre del recinto durante tres días.
No habrá visitas al Monte del Templo (nombre que el judaísmo da lugar a ese recinto) ni hoy ni el miércoles ni el jueves», dice un comunicado de la Policía, que precisa que agentes se han desplegado en toda la zona para «impedir disturbios» de los jóvenes que protestan contra la ocupación israelí de la zona.
La Policía ha informado de que sus agentes habían intervenido brevemente a primera hora para «repeler» a manifestantes que arrojaban piedras y que causaron heridas leves a una mujer que estaba en el Muro de las Lamentaciones, a los pies de la Explanada.
«A pesar de la decisión adoptada [de cerrar la Explanada] también esta mañana jóvenes musulmanes enmascarados lanzaron piedras hacia la puerta de los Mugrabíes [donde se halla apostada la Policía]», dice un parte actualizado en el que anota el caso de la mujer herida.
Según la nota inicial, altos mandos de ese cuerpo de seguridad están en contacto con los líderes palestinos locales y el Wakf Islámico, responsable del lugar, y les «ha exigido que actúen para evitar disturbios y preservar la calma».
Tercer lugar más sagrado para el Islam, después de La Meca y Medina, la Explanada es lugar de frecuentes tensiones y enfrentamientos entre palestinos y las fuerzas israelíes.
Los choques se han reanudado en las últimas cuarenta y ocho horas, con intervenciones policiales para sacar del lugar a los jóvenes atrincherados.
Según la Policía, los atrincherados han levantado barricadas y tienen a su disposición piedras y fuegos artificiales.
El complejo, que Israel considera su lugar más sagrado por haber albergado hace dos mil años el Templo de Jerusalén, está situado en Jerusalén Este, territorio que estaba bajo soberanía jordana cuando Israel lo ocupó en la Guerra de 1967.
Tomado: tercerainformacion