Miles de manifestantes realizaron protestas callejeras este martes en el Estado de Oaxaca, al sur de México, tras el arresto el fin de semana de tres líderes del sindicalismo magisterial, y la imputación contra dos docenas más.
Los maestros bloquearon carreteras para expresar su rechazo a una reforma educativa aprobada por el Congreso federal.
Los sindicatos exigen la liberación de los dirigentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y dejen de ser considerados como criminales.
Las protestas se extienden por las zonas montañosas con predominio de población indígena del extenso territorio de Oaxaca, de más de 90.000 km2, casi el tamaño de Costa Rica.
En las regiones de la sierra sur y del Istmo de Tehuantepec, las protestas magisteriales se realizaron en forma intermitente por decenas de puntos carreteros, aún sin reporte de choques con la policía.
En la capital de Oaxaca, los inconformes montaron un cerco de unas 20 barricadas alrededor del Centro Histórico.
Además de tres dirigentes ya detenidos del sindicalismo magisterial en Oaxaca, la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía federal) busca al menos a otros 24 líderes.
La nueva ley de Educación impone pruebas estandarizadas para optar por la plazas de maestros en todas las zonas del país, sin importar las condiciones socio-económicas y culturales, como las comunidades indígenas.
La comunidad educativa denuncia que es la expresión de un gobierno autoritario que utiliza las instituciones y la fuerza del Estado para acallar las voces de los maestros que en México enseñan cómo se defiende el derecho al empleo y a la educación pública de los pobres.
Para frenar las protestas el gobierno hará “uso moderado de la fuerza”, anunció este martes el comisionado nacional de Seguridad Nacional, Renato Sales.
Tomado: LibreRed | Sputnik