En el documento se evidencia el accionar de Carabineros luego de la detención de estos dos estudiantes. Abogados de derechos humanos resaltan la veracidad de los antecedentes y lo reiterativo que resultan estas conductas por parte de la institución policiaca, quienes además fabrican evidencias para imputar graves delitos a quienes en verdad son las víctimas.
A una serie de torturas fueron sometidos los estudiantes Cristóbal Miranda y Germán Urrutia al interior de vehículos de Fuerzas Especiales de Carabinerossegún el informe de constatación de lesiones de la Comisión de Derechos Humanos del Colegio Médico. Ambos jóvenes fueron detenidos afuera de la sede San Ignacio de la Universidad Técnica Metropolitana el 18 de junio recién pasado durante una jornada de protestas.
El documento sostiene que durante la detención, Miranda, estudiante de segundo año de arquitectura, fue atropellado por un carro lanza gases y luego golpeado repetidamente en la cabeza hasta quedar inconsciente. Una vez en el carro policial, los estudiantes fueron amenazados de muerte, escupidos y continuamente golpeados por los funcionarios policiales, quienes apagaban las luces del vehículo para que la cámara en su interior no pudiera registrar la paliza.
Al ser trasladados para constatar lesiones, Carabineros instruyó a los detenidos para que explicaran sus golpes como el resultado de una caída, sin embargo, al ver la gravedad de las lesiones de Cristóbal Miranda, se decidió su traslado a la Asistencia Pública. .
Al quedar solo con los policías, Germán Urrutia fue sometido con una bolsa plástica en su cabeza, instancia que los uniformados aprovecharon para golpear al estudiante que se encontraba imposibilitado, además, de respirar.
Patricia Vidal, madre de Germán Urrutia detalla parte de estos apremios: “Vivirlo en carne propia es re fuerte, a mi hijo le hicieron el submarino seco, le pusieron la bolsa plástica en tres ocasiones, luego de lo cual el vomitó y convulsionó, porque mi hijo es asmático, además, le pegaron entre seis tipos al mismo tiempo, seis, son tipos gigantes los de Fuerzas Especiales. Mi hijo es flaquito, es alto, pero es flaquito y no desarrolla ninguna actividad física, o sea, primero que todo no te podís defender, pero él tampoco tiene la estructura como para soportar golpes de esa magnitud”.
Verónica Brito, observadora de Derechos Humanos del Sindicato de Unidad de los Trabajadores SUTRA-Chile, llegó a la Posta Central en momentos que se realizaba la constatación de lesiones de Miranda. Sin embargo, la policía uniformada le impidió acercarse a los detenidos, luego de gritar, en pleno centro médico “viene Derechos Humanos”.
De acuerdo al relato de los hechos, Carabineros habría amenazado nuevamente a Cristóbal Miranda, “para que no diga nada” a los observadores de Derechos Humanos quienes solo pudieron ver a los detenidos luego de su regreso a la Cuarta Comisaría.
“Conversamos con ellos y ahí ellos nos cuentan los apremios ilegítimos, las torturas que habían recibido, y Cristóbal estaba objetivamente muy muy mal y Germán confirma que el más golpeado había sido Cristóbal a quien le costaba mucho comer ya que tenía un problema en la mandíbula bastante jodido y en el píe porque lo pasó a llevar el carro”.
El abogado de Derechos Humanos, Cristián Cruz, resaltó la veracidad de los antecedentes y lo reiterativo que resultan estas conductas por parte de la institución policiaca, quienes además fabrican evidencias para imputar graves delitos a quienes en verdad son las víctimas.
“Este informe, avalado por el Colegio Médico, nos habla de torturas, de apremios por parte de funcionarios de Carabineros de Chile, puntualmente por parte de Fuerzas Especiales multiplicidad de golpes, tratar de que no queden evidencias, que se filmase o grabase, escupos, amenazas, intimidación de la más grave, resulta, para mí, verosímil, considerando la experiencia anterior que hemos tenido con Carabineros”.
Finalmente, cabe consignar que para este viernes el Instituto Nacional de Derechos Humanos tiene contemplado presentar una querella contra Carabineros de Chile y los responsables del operativo por el delito de torturas, luego de lo cual se solicitará una audiencia de revisión de medidas cautelares, pues los estudiantes están en prisión preventiva, acusados de porte de bombas incendiarias, acusación que de acuerdo a muchos testimonios resulta absurda.
Tomado: Tercerainformacion
