La Unión Sindical Obrera de la Industria del Petróleo -USO- condena y denuncia la brutal agresión de que fue objeto la compañera Dibeth Quintana, líder sindical de nuestra organización obrera; quien luego de atender una diligencia judicial en la Fiscalía del municipio de Aguachica (Cesar) este 13 de febrero, fue abordada por desconocidos, que la secuestraron, golpearon y ataron de pies y manos, luego la abandonaron en las afueras del municipio. La compañera se encuentra interna en un centro médico del lugar, presentado traumas físicos y un estado emocional delicado.
Lo delicado de la situación es que la compañera ya ha sufrido varios hechos de agresiones y amenazas, como el denunciado el 27 de mayo de 2016, cuando se disponía a ingresar a la refinería de Barrancabermeja, encontró que su carné había sido bloqueado y luego se le impidió entrar a cumplir con su actividad sindical, trató de ingresar y fue agredida por los vigilantes y por integrantes de la Policía Nacional a cargo de la “seguridad” en esa puerta de la Refinería, en esa ocasión debió ser hospitalizada debido a la brutal golpiza que recibió. Este hecho no fue judicializado, no hubo investigación por parte de Ecopetrol ni de la Fiscalía y la impunidad es total.
La compañera Dibeth ha sido objeto de constantes seguimientos y acciones de hostilidad pues con regularidad ha sido interceptada en sus desplazamientos por la fuerza pública con variados pretextos; hay seguimientos y llamadas telefónicas amenazantes a ella y su familia; Ecopetrol se ha negado sistemáticamente a facilitarle mecanismos de protección efectivos.
Exigimos se investigue la posible participación de funcionarios de seguridad física de Ecopetrol y de la Fuerza Pública, frente a la hostilidad sistemática contra la compañera Dibeth Quintana. Así mismo, se investigue el hecho de la citación que se le hiciera a la compañera a la Fiscalía en Aguachica y hoy esta entidad niega haberla citado.
Lamentamos la posición de la administración de Ecopetrol en la Comisión Nacional de Derechos Humanos y Paz, que niega la posibilidad de acoger humanitariamente a la compañera Dibeth, dejando entrever que es más importante los procedimientosburocráticos que la vida de los trabajadores y dirigentes.
La USO exige a las autoridades se investigue este grave hecho y se castigue a los responsables y conmina a Ecopetrol a asumir su responsabilidad en relación con la seguridad e integridad personal de Dibeth, acogiéndola en la Comisión de Derechos Humanos; Hacemos un llamado a la solidaridad nacional e internacional frente al resurgimiento de la violencia antisindical en Colombia.
Tomado: Agencia Prensa Rural