El Pentágono confirmó este lunes que su misil de crucero alcanzó con éxito su objetivo, tras cubrir una distancia de más de 500 kilómetros. El ensayo realizado el pasado 18 de agosto demuestra la responsabilidad de Washington con la ruptura del Tratado sobre misiles de alcance medio y corto (INF, por sus siglas en inglés).
El 2 de agosto Washington abandonó definitivamente el pacto que prohibía el despliegue de misiles de crucero con alcance de entre 500 y 5 500 kilómetros, un acuerdo entre Estados Unidos y la Unión Soviética firmado el 8 de diciembre de 1987, y que significó un alivio para las tensiones existentes en la época, disminuyendo la posibilidad de un enfrentamiento nuclear entre las dos superpotencias.
La prueba realizada por Estados Unidos se produce apenas dos semanas después de su salida del acuerdo, lo que demuestra que Washington se preparaba de antemano para romper el Tratado de manera unilateral.
Tomado: Granma