lunes, 31 de julio de 2023

El imperialismo estadounidense ha sido el protagonista de la tragedia ucraniana

 Se ha promocionado en el mundo entero una indignación moral dirigida a culpar a la Federación Rusa y a su presidente V.V. Putin por la Guerra de Ucrania basada en la acción militar de febrero de 2022. Renovadas demandas en los últimos días requiriendo que Rusia se retire, en vez de condenar a la OTAN dominada por Estados Unidos.

Este autor rechaza tal posición por completo y sostiene su punto de vista sobre los orígenes de la guerra actual que se remontan al golpe de estado dirigido por fascistas respaldados y organizados directamente por los EE.UU. en febrero de 2014. Si discuto este tema, sobre el que se han escrito millones de páginas, es sobre todo por la enorme división que crea entre el movimiento progresista a nivel mundial y con particular énfasis dentro de los Estados Unidos.¹

Breve reseña del conflicto. Las fuerzas progresistas de los Estados Unidos, están gravemente confundidas por el conflicto de Ucrania, y piensan que “comenzó” con la “invasión” rusa de febrero/22.

Aquí relatamos el golpe de estado diseñado y ejecutado por Estados Unidos que preparó el escenario para los catastróficos eventos en Ucrania. Es necesario enfrentar la sistemática falsificación de lo sucedido por los medios “canallas”.

Los comentarios grabados de la entonces representante de Estados Unidos ante la Unión Europea (hoy vice secretaria de Estado, Victoria Nuland)², revelaron que los asesinos que abrieron fuego contra los manifestantes pacíficos en el Maidan de Kiev, eran fascistas del Partido Svoboda y no de las fuerzas del presidente ucraniano Viktor Yanukovich. Los matones que masacraron a 100 manifestantes de Maidan, incluidos varios de los suyos, habían venido de toda Ucrania y de fuera del pais para convertir en un caos las protestas del Maidan.

El senador republicano estadounidense John McCain compartió el escenario de Maidan con el orador fascista y líder del Partido Svoboda, Oleh Tyahnybok, mientras que V. Nuland repartió "galletas de la amistad" estadounidenses a quienes “protestaban. J. McCain enardeció a la multitud con promesas de "democracia, libertad e independencia", supeditadas, por supuesto, a que Ucrania revirtiera los acuerdos ya aprobados por el gobierno con Rusia. V. Nuland comentó en su llamada telefónica interceptada, que el entonces vicepresidente J. Biden, a cargo de los eventos de Ucrania en ese momento, daría el último "atta boy" a los líderes del golpe ².

Se fue más allá. Sus comentarios grabados revelaron que literalmente nombró al nuevo presidente de Ucrania, Arseniy Yatsenyuk, un miembro de extrema derecha de “Patria”, formación ultranacionalista y antirrusa. La Unión Europea (UE), sobre todo Alemania, quería una figura más moderada para dirigir Ucrania. Durante la llamada hackeada, Nuland dijo: "al diablo la Union Europea” (mi nota, en ingles esa expresión suena mucho mas grosera)² El elegido por Estados Unidos, A. Yatsenyuk, se convirtió en el primer ministro de Ucrania, formando una mayoría de gobierno de coalición con el fascista Partido Svoboda.

La ministra de finanzas de los golpistas era la ciudadana estadounidense y diplomática de alto rango, Natalie Jeresko, a quien se le concedió la ciudadanía ucraniana el día después del golpe. Hunter Biden, tomó una posición en la junta directiva de la compañía de gas natural más grande de Ucrania ganando un salario mensual de $ 50,000. Hoy H. Biden esta en una muy precaria situación con la justicia de su país.

En marzo de 2014 el Canal 4 británico identificó al líder del golpe Andriy Parubiy, que dirigió el asalto de la Rada (Parlamento) como miembro de Partido Fascista Svoboda que tiene sus raíces en los movimientos ucranianos pro-nazis de la Segunda Guerra Mundial. Otros miembros de Svoboda, los líderes neonazis Oleksandr Sych; Andriy Mokhnyk; Ihor Shvaika, y Oleh Makhnitsky fueron nombrados para el gabinete de gobierno.

Se establece una base militar estadounidense en Ucrania

Poco después del golpe de 2014, en 2015, los golpistas establecieron el llamado Centro Internacional de Mantenimiento de la Paz y Seguridad, una base militar del oeste de Ucrania administrada por Estados Unidos, que ha sido, según el New York Times del 14 de marzo de 2022, "un centro para que las tropas militares occidentales entrenen a las fuerzas ucranianas desde 2015". El Times agregó: "Tropas de Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá, Polonia, Suecia y Dinamarca, entre otros, han entrenado a 35,000 ucranianos allí bajo un proyecto llamado ’Operación Unifier’". Esta es la "operación" que tenía como objetivo "unir" por la fuerza el oeste de Ucrania, con las poblaciones de habla rusa del este y del sur que rechazaron el golpe fascista.

Reveses iniciales sufridos por los golpistas

Estos golpistas fascistas respaldados por Estados Unidos estaban más que ansiosos por avenirse a la insistencia del imperialismo estadounidense de que la Rada transformada por el golpe de Ucrania sirviera a los intereses estadounidenses. Pero sufrieron algunos reveses inmediatos ya que se movieron demasiado rápido para implementar las demandas de Estados Unidos. En primer lugar, la orden de la Rada dirigida por los fascistas de que el ejército ucraniano marchara y tomara el control de las regiones de habla rusa del este de Ucrania, las regiones de Donbass y Luhansk en particular, resultó ser desastrosa. En estas regiones, el ejército ucraniano se disolvió instantáneamente y se unió a las fuerzas antigolpistas leales al gobierno electo. Lo mismo con las fuerzas armadas en Crimea, en gran parte de habla rusa. En ambos casos, los soldados casi unánimemente se declararon parte del ejército de Rusia. En cuestión de días, las fuerzas dirigidas por los fascistas demostraron ser incapaces de imponer su voluntad en el este de Ucrania.

De hecho, tomó ocho años con el entrenamiento y armamento masivo proporcionado por las fuerzas de EE.UU. / OTAN, acompañado por tropas privadas financiadas por EE.UU. del tipo Blackwater y combatientes mercenarios extranjeros pagados de 28 países, para prepararse para su planeada conquista del este de Ucrania. Para 2022, estas fuerzas acumularon unos 280.000 soldados listos para invadir las regiones de Donbass y Luhansk. En el curso de esta acción a largo plazo, entre 2014 y 2022, las tropas del gobierno golpista ucraniano masacraron a 14.000 personas de habla rusa e hirieron a 50.000 más, mientras que causaron que 700.000 huyeran a Rusia por falta de seguridad.

Los Acuerdos de Minsk saboteados por Estados Unidos

Al no haber logrado conquistar instantáneamente toda Ucrania en 2014, el gobierno golpista se vio obligado a participar en una serie de negociaciones denominadas los Acuerdos de Minsk. Firmados el 5 de septiembre de 2014 y el 12 de febrero de 2015, después de las negociaciones entre el gobierno golpista ucraniano, Rusia, Alemania y Francia, supuestamente tenían como objetivo detener el derramamiento de sangre a través de un alto el fuego, la retirada de armas pesadas de las líneas del frente, la liberación de prisioneros de guerra y una reforma constitucional ucraniana que otorgaba el autogobierno a áreas específicas, incluidas Donbass y Luhansk. En la práctica, ninguno de estos Acuerdos de Minsk se implementó, ya que las incesantes incursiones del ejército ucraniano en las regiones tenían como objetivo la subyugación y la conquista en lugar de la búsqueda de un acuerdo negociado. Unos 100 acuerdos de "alto el fuego" fueron violados repetidamente, mientras que el ejército ucraniano dirigido por fascistas causó horrores y devastación indecibles entre la población de habla rusa.

Presionado por los EE.UU., el gobierno ucraniano se negó a realizar las elecciones autonómicas proyectadas por Minsk en Luhansk y Donetsk. Respaldados por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, la esencia de los acuerdos de Minsk era preservar la integridad territorial de Ucrania a través de un proceso federado que devolvería a las repúblicas separatistas a cambio de su autonomía local. Esto último implicaba que los recursos de las áreas federadas, especialmente las vastas reservas de combustibles fósiles y el acceso a los oleoductos, estarían bajo el control de los gobiernos locales / regionales, y probablemente serían compartidos entre las fuerzas contendientes, una propuesta que Estados Unidos rechazó rotundamente. La élite corporativa estadounidense había puesto su mirada en las reservas de combustibles fósiles de Ucrania, las cuartas más grandes del mundo. Con la destrucción estadounidense de los gasoductos Nord Stream 1 y 2, ahora ha quedado claro que una conquista más ambiciosa y lucrativa está en progreso, planificada con mucha anticipación.

EE.UU. y la OTAN prepararon y preparan a Ucrania para la guerra

A principios de 2022, los masivos envíos de armas proporcionadas por Estados Unidos y la OTAN y con las fuerzas de Ucrania muy fortalecidas el fascismo sentía que estaban listos para imponer su solución final, es decir, la aniquilación de la población de habla rusa que resistía y asegurar permanentemente los combustibles fósiles y las riquezas agrícolas del este de Ucrania para el control corporativo de los Estados Unidos. La respuesta de Rusia era predecible a mi juicio. Las tropas rusas invadieron, para defender el derecho del pueblo de habla rusa de Ucrania, el 30% de su población, a existir, su derecho a la autodeterminación, para evitar que las fuerzas estadounidenses y de la OTAN establezcan bases con armas nucleares a unos pocos minutos de vuelo de Moscú, y para llegar a un acuerdo en la línea de los protocolos de Minsk.

Se critica mucho a V.V. Putin, pero en los Estados Unidos, la represión de Biden adquiere el carácter del clásico puño de hierro en un guante de terciopelo, en el que el monopolio virtual de los medios corporativos impone un consenso orwelliano, destinado a justificar las decenas de miles de millones de dólares a las arcas de la máquina de guerra estadounidense para mantener la guerra de Ucrania. Agregamos aquí que los índices de aprobación de Biden, con apenas el 36% a favor de su ejecutoria, nos informa, usando palabras de Shakespeare que: "No todo anda bien en Dinamarca" ³.

Si Rusia invadió para proteger legítimamente a la asediada población de habla rusa, para impedir que sus gigantescas inversiones en combustibles fósiles e infraestructuras para movilizarlos cayeran sin compensación alguna en manos de del capitalismo estadounidense y europeo, para impedir el emplazamiento de armas nucleares estadounidenses en sus fronteras, todas las preocupaciones legítimas en mi opinión, no caben dudas que la solución de los conflictos por vía pacífica es la única forma de garantizar la futura existencia de la humanidad. El imperialismo estadounidense, desde el primer día, siempre ha sido el protagonista central de la tragedia ucraniana, es algo indiscutible. La reciente destrucción estadounidense de Nord Stream 1 y 2 y los dos ataques para intentar destruir el puente que enlaza Rusia con Crimea lo han dejado muy claro.

Publicado en Cubadebate

Notas
1. Unas 35 organizaciones de izquierda y progresistas de los Estados Unidos, acusan a Rusia y a V.V. Putin de “agresión” contra Ucrania; mientras que otros 16 grupos no se oponen a la hiper masiva “ayuda” militar, incluyendo bombas de racimo que los EE.UU. y la OTAN envían a los fascistas ucranianos en el poder en Kiev.
2. La transcripción completa de la monstruosa conversación telefónica Nuland – Pyat se puede leer en este reporte de la BBC. https://www.bbc.com/news/world-europe-26079957
3. William Shakespeare. “La tragedia de Hamlet, príncipe de Dinamarca” circa 1599. Primer acto, segunda escena.

Tomado: Agencia Prensa Rural