sábado, 22 de septiembre de 2012

Comandante Mauricio Jaramillo (FARC) : “Estamos dispuestos a alcanzar la paz democrática y duradera”


El corresponsal de Radio Nacional de Venezuela (RNV) en La Habana, Cuba, Raimundo Urrechaga, entrevistó en exclusiva al Comandante Mauricio Jaramillo, representante de la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), para conocer a fondo los puntos de vista de las FARC con vistas a las conversaciones de paz a iniciarse el próximo 8 de octubre en Oslo, Noruega.
¿Cuál es la diferencia entre este diálogo de paz (Gobierno de Santos y FARC) y los otros del pasado?
– Si hay diferencias porque se ha recrudecido el desarrollo de la política neoliberal en Colombia y por lo tanto hay más desigual social y desequilibrio en esta sociedad tan golpeada y amedrentada. El Gobierno colombiano dice que ha hecho un esfuerzo grande, por eso estamos sentados tratando de solucionar todos esos problemas.
Estamos precedidos de un gobierno inquisidor que ha prohibido a las personas manifestarse y ha perdido todas sus posibilidades democráticas. Colombia está sumergida en un problema grave.
– Nosotros, FARC, tenemos la voluntad política de solucionar este problema, por eso estamos en este diálogo. Estamos dispuestos a alcanzar la paz democrática y duradera.
Comandante, hay seis temas que se acordaron dentro de este diálogo. Sin embargo, usted indicó en una rueda de prensa que tan pronto se instale la mesa de diálogo plantearán y palearán por un cese al fuego bilateral, lo cual fue respondido de manera negativa por el presidente Juan Manuel Santos. Asimismo, el Mandatario planteó un límite de tiempo para este proceso que será en junio de 2013. ¿Cómo creen ustedes que pudieran persuadir al Gobierno, que lo mejor para Colombia sería iniciar unos diálogos con el cese al fuego y si creen que es suficiente tiempo el que se ha establecido por el Gobierno colombiano para llegar a un acuerdo final?
– Lo lógico en un acuerdo de este tipo es que esté precedido por un cese al fuego para crear todas las condiciones y poder avanzar hacia lo que nos hemos propuesto. Si hay voluntad política, el Gobierno tiene que acceder y nosotros haremos lo mismo, pero si el Gobierno no tiene una pretensión de ese mismo tipo, es muy difícil que las partes se puedan acercar a una posibilidad real porque esa distancia crea inestabilidad en lo que vamos a desarrollar. Vamos a esperar que el Gobierno tome esas decisiones.
Hay varios temas en la agenda que impactan a la sociedad colombiana. Un primer punto que se plantea en este acuerdo, es la política de desarrollo agrario integral. ¿Cómo concibe la FARC este punto para lograr un desarrollo social, económico y equitativo del país?
– Ese es uno de los temas fundamentales que tenemos que enfrentar. Básicamente el tema social para Colombia es uno de los temas fundamentales donde Colombia está en un proceso de deslegitimación total donde la genta está desprovista de todos los servicios primarios. El desarrollo ecónomo también es un desarrollo desigual, es una economía dependiente de los Estados Unidos.
En el tema de las tierras, el Gobierno trae un paquete que tiene que ser un poco de leyes de desarrollo rural y de tierras, pero nosotros creemos que no es tan simple hablar de estas cosas sino hay que hablar de una forma agraria integral donde en Colombia hay que verlo desde el punto de vista de las regiones, y por lo tanto habrá que hablar de unas cinco reformas agrarias distintas. Creo que el Gobierno y nosotros –FARC– tenemos que hacer un esfuerzo grande para allanar todos estos problemas.
Otro de los temas es el narcotráfico que ha sido bandera política para los grupos de poder en Colombia, entre ellos el expresidente Álvaro Uribe, quien acusa a las FARC de ser los principales responsables de ese flagelo en el país ¿Cómo las FARC plantea una solución al problema de las drogas ilícitas en Colombia?
– Desde un inicio nosotros hemos planteado la posible solución y se lo propusimos al país, al Gobierno y al mundo, el cual abarca una salida a los cultivos de este tipo de drogas. Nosotros decíamos que el problema no es un problema de carácter militar sino un problema de carácter social, y como tal proponíamos encararlo con políticas que tienen que ver con la eliminación de las drogas y plantearle al pueblo colombiano, a los cultivadores que son los campesinos más pobres cómo sustituir estos cultivos. Eso lo hicimos frente a más de 40 países, ahora lo están planteando.
– El gobierno colombiano está siendo juzgado por la justicia. Hay unos 80 parlamentarios que están comprometidos con estos cargos.
Uno de los puntos de la agenda de paz es la participación política. Allí se establecen varias posiciones entre los cuales está el de derecho y garantía para el ejercicio de la oposición política en general y en particular para los nuevos movimientos que surjan luego de la firma del acuerdo final, mecanismos democráticos de participación ciudadana, incluidos los de participación directa y medidas efectivas para promover mayor participación en la política nacional, regional y local. Teniendo en cuenta la experiencia del pasado de distintas movilizaciones de otros grupos guerrilleros ¿Cómo se puede hacer viable en el contexto actual de Colombia, una participación social y política de la izquierda? ¿No temen ustedes que si logran un acuerdo puede repetirse situaciones donde fueron eliminados los más importantes líderes de la izquierda colombiana?
– Indudablemente, nosotros atravesamos por esta incógnita de esperar que el Gobierno cumpla con todo lo que está planteando al país. Es un poco difícil, en el sentido de cómo está rodeado el Gobierno, ya que hay una cantidad de problemas de carácter político. Comenzando por esta vertiente más ultraderechista que es la de Uribe Vélez. Nosotros estamos esperando cómo transcurre todo esto y cómo se van viendo las posibilidades para que Colombia entre en un desarrollo político que les permita a todas las personas participar abiertamente y democráticamente.
– Es muy importante que el pueblo colombiano y el pueblo latinoamericano esté pendiente, por ello estamos solicitando el acompañamiento para estas posibilidades se vuelvan una realidad.
En las declaraciones y en los principios de las FARC se reitera un aspecto vital que es el apoyo popular del pueblo colombiano no solo para lograr un acuerdo de paz sino para desmontar las causas que dieron origen a este conflicto de hace décadas ¿Cómo lograr ese apoyo masivo para alcanzar ahora los cambios estructurales que requiere Colombia casi medio siglo después?
– Ese apoyo popular a través de estos últimos años, la sociedad colombiana ha comenzado a exigirle al gobierno y a las FARC entrar en una etapa de conversaciones para alcanzar una salida distinta a todos estos problemas que tenemos en Colombia. Las movilizaciones últimas que se han realizado en el país, dan cuenta de que hay la necesita de sentarnos en la mesa, con la participación de todos estos movimientos sociales.
Según este documento para iniciar el diálogo se establece que la construcción de la paz es un asunto de la sociedad en su conjunto que requiere la participación de todos sin distinción. Se ha suscitado en Colombia en los últimos días un gran debate de distintas organizaciones de la sociedad civil sobre su participación en la mesa de diálogo entre las FARC y el Gobierno ¿Cree las FARC que organizaciones de la sociedad civil, que representan al pueblo colombiano, deben participar de manera directa en este diálogo que se va a iniciar próximamente?
– Ellos van a ser actores de primera en la mesa. Van a estar alrededor nuestro y van a rubricar muchos de los acuerdos en la mesa. Estarán como actores de primer tipo. Esperamos que toda la sociedad civil, no solamente colombiana sino los países vecinos y latinoamericanos estén pendientes para que no haya confusiones. No vamos a caer como siempre hemos caído, que nosotros hemos sido siempre los que hemos acabado o o damos por terminado los proceso de paz.
En todos estos años hemos peleado por salir adelante y por alcanzar una paz estable y duradera. Eso ha sido siempre unos de los elementos fundamentales para nosotros, por ejemplo cuando estuvimos en Caracas y en San Vicente del Caguán, donde todos esos procesos fueron fallidos porque el gobierno lo dio por terminado.
Tras el anuncio de estos diálogos, distintos sectores de la sociedad colombiana se han pronunciado en contra, entre ellos aquellas personas que apuestan al conflicto armado como una forma de vida de hacer negocio y de participación política en Colombia ¿Cómo interpretar esas declaraciones de esos sectores de la sociedad particular donde sean visto pronunciamientos del expresidente Álvaro Uribe y superar esos obstáculos de grupos tan poderosos para que impere la paz en el país?
– Indudablemente estamos esperando el concurso de todo el país. Hay muchos obstáculos de frente y tenemos que tratar de que esos obstáculos no sean el elemento que frustre ese diálogo. Creemos que los Estados Unidos son directamente responsables de estas trabas que se nos están presentando, porque ellos están instigando el Plan Colombia, el Plan Patriota, están colocando las bases militares en nuestra Patria. Nosotros no estamos en guerra con ningún país vecino, la militarización es extrema. Todos estos elementos son trabas para no alcanzar lo que nos hemos propuesto. En estos tiempos que está en desarrollo los TLC y esta economía neoliberal que es muy difícil, porque el desarrollo de todo eso está en las privatizaciones.
– Por ejemplo, comenzó la minería pero en Colombia solo van a quedar muchos huecos porque la riqueza del subsuelo va a desaparecer.
Hemos visto que en América Latina y el Caribe muchos gobiernos han cogido con beneplácito este diálogo para tratar que en Colombia reine la paz, siendo el único país de América Latina que tiene aun un conflicto armado ¿Cree las FARC que la situación política, social y económica que vive el continente hoy, y en particular con gobiernos que buscan la felicidad y el bienestar de su pueblo propicia estos diálogos para buscar la paz?
– Hemos recibido el apoyo incondicional de parte del gobierno de Cuba y Venezuela, que son países fundamentales para el desarrollo de la activada que estamos desarrollando. Ya hemos recibido apoyo de Argentina, Ecuador, Nicaragua, incluyendo el presidente Obama, esperamos que así sea.
– Con respecto al desarrollo económico que han obtenido todos estos países de América del Sur contrasta mucho con las dificultades que tiene los otros países de Europa y Estados Unidos.
Cómo ver que este diálogo que se va a iniciar próximamente no es una victoria del gobierno colombiano y una debilidad de las FARC?
– Cuando comenzamos a hablar fue porque en un momento determinado el Gobierno nos propuso hablar. En desarrollo de esta propuesta buscamos una posibilidad distinta de encontrar la paz, analizamos la propuesta y expresamos que estamos en plena disponibilidad y no porque estemos derrotados. El Gobierno propuso y estamos de acuerdo con la invitación.
En uno de los pronunciamientos del máximo líder de las FARC, Timoleon Jiménez, expresó que llegan a la mesa de diálogo sin rencores y arrogancias para plantearle al Gobierno nacional que considere importante a los de abajo y que no juzgue con ingenuidades sus anhelos ¿Qué ofrece las FARC al pueblo colombiano a aquellos que han sido borrados por los grandes consorcios mediáticos y los grupos de poder durante décadas?
– Estamos peleando fundamentalmente porque en Colombia haya una inclusión de todos esos actores que han sido excluidos, apabullados, amedrentados por el Gobierno nacional y que no les ha permitido la participación en todos los eventos que tiene referencia en un país como Colombia. Nuestra pelea es que todos los pobres de Colombia sean incluidos como parte de la sociedad.

Publicado por AFP NOTICIAS para Agencia Fariana de Prensa – Frente Antonio Nariño el 9/20/2012
Tomado: tercerainformacion.es