La Policía de Carabineros desalojó hoy por la fuerza a los estudiantes que ocupaban una veintena de colegios, previstos por las autoridades chilenas como centros de votación en los comicios primarios del domingo.
La acción comenzó en la madrugada, pese a que estaba pendiente una negociación entre la Asociación Chilena de Municipalidades (ACHM) y el Servicio Electoral (Servel), a fin de buscar sedes alternativas a las escuelas tomadas.
Los integrantes de la ACHM solicitaron al presidente del Consejo Directivo del Servel, Juan Emilio Cheyre, que no haya violencia (en los desalojos) y que fueran cambiados los colegios, decisión que se adoptaría esta mañana.
El vocero de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios, Moisés Paredes, denunció en entrevista con el canal público 24 Horas que la policía sacó por los pelos a varias estudiantes.
Alrededor de las 07:00 hora local fue desocupado el último colegio en poder de los alumnos, el liceo Manuel de Salas, una institución particular dependiente de la Universidad de Chile, tomada por los estudiantes en la tarde del miércoles.
Según declaró a 24 Horas un profesor del plantel, el director del liceo fue detenido por Carabineros.
Uno de los desalojos más violentos tuvo lugar en el colegio Carmela Carvajal de Prat, en la comuna de Providencia, donde arrestaron a más de una decena de alumnas.
Los jóvenes se enfrentaron a la policía lanzando varios objetos, mientras eran repelidos con gases lacrimógenos y carros lanza-agua.
"Quiero decir categóricamente que cualesquiera que sean las excusas... esta es una muy mala decisión, las autoridades tenemos que mostrar que por el camino del diálogo se pueden resolver los problemas", expresó la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá.
Los alumnos aseguran que las ocupaciones son una respuesta a la falta de solución del Gobierno a las demandas históricas en el terreno de la educación, fundamentalmente el reclamo de enseñanza pública, gratuita y de calidad.
Este martes, el presidente Sebastián Piñera advirtió que desalojaría a los estudiantes que mantenían ocupados colegios previstos como centros de votación, si no deponían su actitud.
"No vamos a permitir que una pequeña minoría, saltándose la ley, pretenda usurparles a los 13 millones de ciudadanos chilenos su derecho democrático de poder participar en las elecciones primarias del próximo domingo", expresó el mandatario en una declaración desde el Palacio de La Moneda.
Tomado: Prensa Latina