WASHINGTON, 30 de noviembre.— Estados Unidos es el único país del mundo que condena a cadena perpetua, sin posibilidad de libertad condicional, a menores de edad, en abierta violación de la Convención de la ONU sobre los Derechos del Niño que prohíbe expresamente este tipo de penas para los menores de 18 años.
"En Estados Unidos, una persona menor de 18 años no puede votar, comprar bebidas alcohólicas, billetes de lotería o cigarrillos, ni prestar su consentimiento en la mayoría de los tratamientos médicos, pero sí puede ser condenada a morir en prisión por sus acciones", denunció la investigadora adjunta sobre EE.UU. de Amnistía Internacional, Natacha Mension.
Según un informe emitido este miércoles por la organización, niños que tan solo tenían 11 años en el momento de la comisión del delito fueron condenados a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional en ese país.
En Estados Unidos esta condena puede imponerse a menores infractores como pena preceptiva, sin tener en cuenta circunstancias atenuantes como el historial de abusos o de traumas, el grado de participación en el delito, el estado de la salud mental o la receptividad a la rehabilitación, según el documento.
La organización reclamó también a las autoridades norteamericanas que revisen los casos de las más de 2 500 personas actualmente condenadas a cadena perpetua, a fin de que sean conformes a lo exigido por el Derecho Internacional.
Tomado: Granma