Delegaciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el gobierno de ese país continúan hoy la mesa de conversaciones en La Habana con otra ronda de diálogos centrados en el tema de la participación política.
Durante la jornada de ayer ambas partes reiniciaron las pláticas en el Palacio de Convenciones, sede de la mesa desde noviembre pasado, para dar comienzo al decimosexto ciclo.
En declaraciones a la prensa, la guerrilla reiteró su voluntad de continuar en la mesa y de avanzar en la búsqueda de un acuerdo final que desemboque en la paz.
Además, la guerrillera Laura Villa saludó la celebración en Bogotá de la Cumbre Nacional Mujeres y Paz, encuentro que, consideró, contribuye a la construcción de la paz en Colombia.
Al respecto, Villa precisó que la violencia contra la mujer hace parte de la violencia estructural que generalmente las clases explotadoras ejercen contra el conjunto de la sociedad.
En tal sentido, agregó, reivindicar sus derechos implica descartar toda visión reduccionista del sentido de la paz, asumiéndola como la ausencia de la guerra o como el resultado de la dejación de las armas, lo cual se le suele exigir a la insurgencia sin tomar en cuenta las causas que han llevado al alzamiento.
Reiteró además que la paz implica una lucha de todos por erradicar las causas sociales y políticas que generaron la confrontación, tales como la pobreza, la desigualdad, desmilitarizar a la sociedad y el Estado, entre otras.
Finalmente, Villa instó a abrir las compuertas de la discusión de la agenda al país y al mundo.
Urge que el proceso de paz abra las puertas de la participación al conjunto de la sociedad, y en especial a la mujer, expresó la guerrillera.
Las delegaciones llegaron a un primer acuerdo parcial a finales de mayo sobre la cuestión agraria.
Tomado: Prensa Latina