Según ha comunicado este miércoles el opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), 29 civiles han perdido la vida como consecuencia de una serie de bombardeos de la coalición contra Al-Raqa.
“Al menos hay ocho niños entre los muertos”, ha reconocido el director del OSDH, Rami Abdel Rahman, para luego mencionar que las fuerzas kurdas apoyadas por EE.UU. “controlan el 50 % de la ciudad de Al-Raqa a pesar de la feroz resistencia presentada” por el EIIL (Daesh, en árabe).
Lo ocurrido no es nada nuevo. La llamada coalición, más que ser una amenaza para los terroristas, desafortunadamente es un peligro tanto para los civiles como para las fuerzas gubernamentales sirias e incluso ha dificultado, en reiteradas ocasiones, el avance de la lucha antiterrorista al atacar posiciones del Ejército sirio.
Mientras que EE.UU. ha reconocido que sus campañas aéreas contra los terroristas del EIIL en Irak y Siria desde 2014 han dejado unas 500 víctimas civiles, la organización de periodistas independientes Airwars pone de relieve que el balance es en realidad ocho veces superior, con al menos 3817 civiles muertos desde ese mismo año
Tomado: tercerainformacion