El miembro del Buró Político del Partido y ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla denunció que Creative Associates International es una fachada del gobierno de Estados Unidos para diseñar golpes de Estado suave contra la Isla y otros países.
En un hilo de mensajes, a través de su cuenta en Twitter, el titular compartió una investigación de MintPress News sobre el uso de esta asociación por parte de Washington para imponer su hegemonía mundial.
«Con presencia hoy en al menos 85 países, emplea técnicas de poder blando y diseña operaciones de cambio de régimen y transiciones políticas», escribió el Canciller.
El jefe de la diplomacia cubana señaló, además, que «prácticamente la totalidad de su financiamiento proviene de Washington».
«Durante años trabajó en Cuba, en complicidad con la CIA y otras agencias gubernamentales, promoviendo diversos proyectos destinados a derrocar a nuestro gobierno», enfatizó.
En un reportaje titulado «Creative Associates International (CAI): no es exactamente la CIA, pero lo suficientemente cerca», el proyecto MintPress News denuncia que «Si bien los ejércitos mercenarios como Blackwater al menos han sido objeto de investigación, lo que ha hecho que el nombre de la empresa sea infame en todo el mundo, Creative Associates International ha pasado prácticamente desapercibido, exactamente donde la junta directiva de la organización quiere que esté».
Cuba es mencionada varias veces durante la investigación. Se explica, por ejemplo, que en los últimos 20 años, el gobierno ha otorgado a Creative Associates $ 1,998,138,515 en contratos, según Tracey Eaton, periodista que ha estudiado las actividades de la empresa en Cuba.
Explican, además, que «durante años, Creative Associates International trabajó en estrecha colaboración con la CIA y otras agencias gubernamentales, operando y supervisando un conjunto complejo de proyectos dirigidos a Cuba, todos con un objetivo específico: el derrocamiento del gobierno comunista».
«El proyecto más infame de Creative Associates fue quizás la creación de una aplicación similar a Twitter llamada Zunzuneo. Zunzuneo primero operó como una herramienta de comunicación muy útil pero, lentamente, sus creadores le inyectaron mensajes de cambio de régimen, con el plan de eventualmente dirigir a todos los usuarios para que asistieran a manifestaciones y fomentaran una revolución de color caribeña», agrega la investigación, donde también se explica como el gobierno de Estados Unidos quiso ocultar su propio papel en la creación de la aplicación, intentando en secreto convencer al director ejecutivo de Twitter, Jack Dorsey, de que comprara la empresa como testaferro.
También, entre 2009 y 2014, se encargó «de reclutar agentes de cambio de régimen en la Isla» trayendo a Cuba a jóvenes activistas de toda América Latina bajo el disfraz de una campaña falsa de concientización sobre el VIH/sida. Igualmente «ha intentado utilizar a la comunidad cubana del hip hop como vehículo para lograr sus objetivos, y así, en 2009, envió al promotor musical serbio y experto en revolución de colores Rajko Bozic a la Isla, donde intentó identificar y sobornar a raperos para que se unieran a su proyecto.
Tomado: Granma