La UNE denuncia en la convocatoria los recortes presupuestarios en las universidades, que dejan a las instituciones en estado de emergencia, sin recursos, y en riesgo de cerrar sus puertas.
‘En medio de la pandemia, en la que es necesario reforzar la investigación, las adaptaciones para las clases a distancia o educación híbrida, ampliar las políticas de permanencia, pues los estudiantes y sus familias perdieron ingresos, el Gobierno opta por desechar la educación. Es inaceptable’, afirmó Bruna Brelaz, presidenta de la UNE.
Las entidades de educandos también alertan sobre la omisión del Ministerio de Educación que no presenta proyectos de inversión para el sector, ni propuestas y recursos para adecuar las escuelas para el regreso seguro a clases.
Este martes, la UNE y partidos, como el de los Trabajadores, presentaron un Argumento de Incumplimiento de un Precepto Fundamental (ADPF) en el Supremo Tribunal Federal para reabrir la inscripción con exención a estudiantes ausentes en la edición de 2020, que no pudieron cumplir el plazo de justificación, por sospechas de Covid-19.
Las razones de la ADPF son los 3,2 millones de participantes en el Examen Nacional de Enseñanza Media de este año sin exención en comparación con la edición del año pasado, muchos de ellos perjudicados por la decisión de la cartera de Educación de retirar la gratuidad a los candidatos ausentes en 2020.
Tal determinación representa la negación a la gravedad de la pandemia (a las condiciones adversas cuando se realizó la prueba en medio de la segunda ola en Brasil) y que perjudica a millones de estudiantes de bajos ingresos, lo cual resulta en un 46 por ciento menos de matriculados que en 2020, volviendo al nivel de 2005.
‘La última edición del examen estuvo marcada por la desigualdad. No aceptaremos otra prueba en el que se dejen atrás los sueños de millones de jóvenes’, aseveró Rozana Barroso, presidenta de la Unión Brasileña de Estudiantes de Secundarias.
Según los organizadores, la movilización estudiantil forma parte de la Campaña #ForaBolsonaro (Fuera Bolsonaro), que tuvo su cuarta manifestación el 24 de julio.
En todas las protestas, además de la demanda de destitución del gobernante, los manifestantes exigen aligerar el proceso de vacunación masiva antiCovid-19 y subir a 600 reales mensuales (unos 106 dólares) la ayuda de emergencia para trabajadores informales, desempleados y familias pobres.
De igual manera, se incluyó la petición de más recursos para la educación y contra la privatización de las empresas Eletrobras y Correos.
Tomado: tercerainformacion