Miles de militantes del Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) y de Vía Campesina de Brasil realizaron ayer protestas, ocupaciones de haciendas y bloqueo de rutas en todo el país.
El objetivo de la movilización fue presionar al gobierno a acelerar la reforma agraria que reclaman 150.000 familias en precarios campamentos. Se realiza en el marco de las protestas anuales bautizadas como Abril Rojo, en recuerdo de los 19 campesinos brasileños muertos el 17 de abril de 1996 por la represión policial durante una protesta en la localidad amazónica de Eldorado de Carajás.
Queremos incluir la reforma agraria en la agenda y presionar al gobierno federal para que realice expropiaciones de tierras”, afirmó Rosana Fernandes, de la coordinación nacional del MST.
Los campesinos también demandan el fin de la impunidad para los centenares de autores de crímenes en el marco de la lucha por la tenencia de tierras. Según el coordinador nacional del MST, Joao Pedro Stédile, desde que terminó el período de 21 años de dictadura militar fueron asesinados en Brasil más de 1700 líderes de trabajadores sin tierra y sus defensores, pero sólo 91 de estos crímenes llegaron a ser juzgados.
Además de las manifestaciones campesinas, el Movimiento de los Trabajadores sin Techo anunció que reunirá 10.000 personas delante de la Municipalidad de San Pablo, en demanda de una nueva política de viviendas populares. El alcalde de San Pablo, Fernando Haddad, reconoció que hay escasez de viviendas populares en esa megaciudad, pero afirmó que necesita más tiempo para proponer una solución al problema.
Estas manifestaciones se inscriben en la continuación de la movilización el martes de centenares de indígenas guaraní kaiowá para pedir al Congreso frenar reformas que benefician al poderoso sector agrícola.
Tomado: Pagina/12